La pandemia por el coronavirus ha tenido una gran incidencia en el gran consumo, y ha puesto en valor aquellas empresas que están llevando a cabo una comunicación transparente y con iniciativas sociales y medioambientales responsables.
En este sentido, la sostenibilidad gana importancia y se ve reflejado en las preferencias de los consumidores. Por esa razón, Tiendeo.com recoge las principales tendencias sostenibles que marcarán el futuro próximo del gran consumo.
1.El precio y lo eco marcan la compra
La primera repercusión del confinamiento fue en el tipo de productos que llenaban el carro de la compra, priorizando la alimentación y todo aquello que cubría las necesidades básicas. Las compras impulsivas pasaron a un segundo plano y aunque es cierto que los intereses de los consumidores poco a poco vuelven a la normalidad, estos han adquirido el hábito de planificar la compra de una forma más racional y eco. Así, el precio será un factor determinante junto a una mayor preocupación por la calidad de los mismos, en pro de una vida más sana.
2. El comercio local gana valor
La crisis económica causada por la pandemia ha llevado al cierre de miles de negocios nacionales, siendo el pequeño negocio el más dañado de esta situación. Al regresar a la normalidad, los consumidores deberán contribuir para salir de la crisis, ayudando al comercio local y a los productos nacionales. Esto puede significar ser más proteccionistas en sus hábitos de consumo con el fin de impulsar la industria nacional.
3.Menos papel y más digital
El mercado online ha ganado un peso indiscutible en la comunicación entre retailers y clientes por ser el canal más accesible. Las circunstancias hicieron que los soportes más tradicionales perdieran eficacia y se interrumpió la producción de folletos en papel, optando por su versión digital, lo que ha permitido transmitir las ventajas que ofrece este canal.
4. Los beneficios medioambientales del teletrabajo
El teletrabajo se convirtió ya en una nueva modalidad de trabajo para muchos ciudadanos, aunque se debe tener en cuenta que este hecho provocará cambios en la experiencia del cliente en cuanto a horarios, días de mayor afluencia a tiendas y fidelidad hacia los retailers, ganando peso, por ejemplo, los supermercados situados en centros urbanos, cerca de los consumidores.
5.Diversificación de las compras
El e-commerce y la tienda física conviven, durante la emergencia sanitaria, muchas familias optaron por realizar por primera vez o aumentar sus compras online y esto dará paso a una mayor diversificación entre tienda física e e-commerce, lo que supone un reto logístico para retailers. Ofrecer a los clientes diferentes opciones como click&collect, entrega a domicilio o compra online aportan un valor añadido al comercio.
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