El llenado aséptico en frío se expande ante el aumento de consumidores interesados por las bebidas naturales carentes de conservantes, así como por los productos con valor añadido.
Debido a esto, cada vez más los productores les ofrecen bebidas sin gas o con poco gas, a menudo con un valor pH más alto y fáciles de digerir.
Para el desarrollo de estos productos en casi inevitable el llenado aséptico en frío. Así pueden presentarse al consumidor bebidas procesadas con mucho esmero, sin un tratamiento térmico adicional, como ocurre, por ejemplo, al realizar el llenado en caliente, y sin añadir conservantes.
¿Qué es el llenado aséptico?
El llenado aséptico en frío también es conocido como llenado aséptico, llenado estéril o envases asépticos. Se trata de envasar un producto a temperatura ambiente, es decir, sin pasteurización en túnel ni llenado en caliente, y sin utilizar conservantes ni agentes esterilizantes en frío, de tal forma que los alimentos se conserven por un espacio de tiempo definido.
Los productos solo se calientan brevemente antes de ser envasados.
El llenado aséptico se recomienda particularmente para envasar zumos de frutas, bebidas a base de té, bebidas isotónicas, zumos de hortalizas, mezclas de agua mineral y zumos de frutas, bebidas a base de leche, leche UHT (Ultra-High-Temperature), bebidas Near Water o aguas aromatizadas. Esta técnica de llenado es posible en bebidas con gas o sin gas.
Sólo un sistema completo integrado es capaz de garantizar la funcionalidad del llenado aséptico en frío. La periferia debe corresponder con el procedimiento aséptico o ser también aséptica. Así ocurre, por ejemplo, en la tecnología de los procesos de la instalación de pasteurización a alta temperatura o de temperatura ultra-alta, así como del mezclador con cisterna tampón estéril, de los accesorios asépticos y de la preparación de la solución desinfectante, del agua estéril, del aire estéril, del vapor y del gas inerte.
Un llenado aséptico en frío puede reemplazar el llenado en caliente de botellas y latas con pasteurizador de túnel. Pero siempre es necesario un planteamiento integral que contemple la seguridad de llenado, los costes de servicio y la seguridad de servicio y lo tenga en cuenta en la realización
¿Esterilización seca o húmeda?
El envasado aséptico de las bebidas se viene realizando ya desde hace décadas.
El llenado aséptico en frío corresponde al estado actual de la técnica, pero el rendimiento de las instalaciones es relativamente bajo y los envasadores están muy ligados al proveedor del material de envasado.
En los envases PET, este tipo de llenado es “relativamente” nuevo, aunque ya lleva aplicándose más de una década en la práctica. En un principio se han implantado dos métodos: la esterilización “seca” y la esterilización “húmeda”, con sus respectivas ventajas y desventajas.
El llenado aséptico “húmedo” esteriliza los recipientes con una mezcla de ácido paracético y vapor, que actúa como vehículo, distribuidor y activador del desinfectante. Garantiza una humectación íntegra de la superficie, así como una desinfección de la atmósfera. De esta forma es posible una reducción eficaz de los gérmenes consumiendo pequeñas cantidades de desinfectante.
Al mismo tiempo se desinfectan los cierres en un proceso completamente automático, por inmersión en ácido paracético.
En determinados casos se recomienda aplicar el método de esterilización en seco con H2O2 (peróxido de hidrógeno) en vez del método hasta ahora usual de esterilización húmeda con ácido paracético.
Particularmente en el sector lácteo, el método de desinfección clásico y más extendido es el H2O2. También para los usuarios que cambian el envase de cartón por el llenado aséptico en PET, H2O2 es un desinfectante conocido y usual. La esterilización seca también es el método recomendable cuando el precio del agua y de la eliminación de las aguas residuales es muy alto.
¿Se harán todavía más pequeñas las salas limpias?
Hoy en día, el llenado aséptico en frío es un procedimiento muy extendido que se adapta constantemente a los nuevos requerimientos. Uno de ellos es la eficiencia energética y la rentabilidad ante el incremento de los precios de la energía que, por ejemplo, puede alcanzarse con la reducción del espacio de las salas limpias para el llenado aséptico.
Con las posibilidades del llenado aséptico, las empresas envasadoras invierten en el futuro de su empresa y pueden realizar productos nuevos y orientados al consumidor.