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La gestión del packaging es primordial para el correcto funcionamiento de la cadena; un envase es la parte visible de todo un proceso productivo que inicia con la idea del producto y finaliza cuando el empaque es desechado por el consumidor.
- Para debatir sobre la mejor forma de enlazar todos los elementos de esta cadena, el Instituto Argentino del Envase (IAE) realizó el seminario “La Gestión del packaging: Investigación, Diseño y Desarrollo”, en el cual Enfasis Packaging estuvo presente.
El IAE comenzó su actividad en 1969 con el objetivo de trabajar por el cuidado del consumidor, el medio ambiente, el crecimiento empresarial y el perfeccionamiento constante. Los seminarios de capacitación comenzaron en 1970 y se realizan con temáticas surgidas de las inquietudes de los participantes.
El encuentro, realizado los días 8 y 9 de abril, profundizó sobre la gestión en el desarrollo del embalaje y su vinculación con el cuidado del medio ambiente.
Disminuir los desechos del packaging
Una de las mayores dificultades que genera el packaging es su eliminación. Según Ricardo Dunogent -diseñador industrial y profesor permanente del IAE- el 90% de todo el material que se tira a la basura en las grandes ciudades es packaging (plástico, cartón, hojalata, aluminio, madera).
“Es un fenómeno a nivel mundial porque el nivel de necesidad de los consumidores es tener envases para un consumo rápido y esto está relacionado con el desarrollo industrial y el estilo de vida contra reloj”.
Pirámide post consumo
Dunogent describió, a través de una pirámide post consumo, el trabajo que se realiza con los desechos. Así, desde el punto de vista de la sustentabilidad, observó que la opción menos favorable (en la base de la pirámide), y la más utilizada, es la eliminación de los residuos.
Mientras que otras opciones más favorables para el medio ambiente pero menos instaladas socialmente son: la recuperación energética (por el quemado se genera el vapor pero hay emisión de CO2), reciclado (para tener una planta de reciclado hay que invertir más que si se tiene que comprar materia prima virgen), reutilización, minimización (reducción de los niveles de masa, de espesores) y prevención.
Ante las demoras en soluciones como compostaje, vertederos e incineradores, Dunogent hizo hincapié en la importancia de un envase que cumpla con las 3R: Reducir, Reutilizar y Reciclar.
En este último caso hay que tener en cuenta que un producto reciclable también puede dañar al medio ambiente si su huella de carbono es alta.
- Celulósicos: fácilmente reciclables - bajo nivel de energía utilizada
- Vidrio: reciclable en un 100% de su masa - alto nivel de energía para su reciclado.
- Plásticos: complejo nivel de reciclabilidad para uso en envases, utilización para elementos de menor calidad y como carga en compuestos mix.
- Metálicos: alta reciclabilidad - alto nivel de energía en transformación.
Gestión del packaging: el envase comunica
Para Ricardo Touil -gerente de soporte técnico en empaque para Latinoamérica de Procter & Gamble-, quien disertó sobre el packaging como elemento de marketing, al diseñar un producto se debe lograr una mimetización entre éste y su envase.
Esto le va a permitir un reconocimiento más allá de los cambios que se realicen con el tiempo.
“El mejor empaque no es el más caro sino el que comunica lo que tiene adentro. Lo que hay que tratar de lograr es la relación entre consumidor y producto sin ruidos ni engaños”. El equilibrio entre la calidad del producto y la información que brinda el empaque es el valor agregado que se ofrece al consumidor.
A su vez, para la elección de materiales y diseño no hay que perder de vista la relación del envase con su historia, el contexto en el que se inserta, las costumbres, la economía y la tecnología. “El empaque no es una cosa aislada, tiene mucho que ver con lo que pasa en la sociedad” explica Touil.
Innovaciones y tendencias
El packaging, en todo su sistema productivo, presenta innovaciones que marcan tendencias en cada rubro.
Según los especialistas, las novedades son:
- Envases inteligentes: son la combinación de alta tecnología con los materiales tradicionales del packaging. Se utilizan en multilaminados, envases de cartón, cartulina, y permiten una interconexión entre el envase y el consumidor.
Los envases contienen un microchip que les permite “hablar” con el comprador, transmitir aromas, movimiento, información sobre la cadena de frío.
La tecnología que utilizan puede ser RFID (chip que va en cada uno de los envases con un lote por unidad de producto), tintas termocrómicas (generan señales sobre la temperatura del producto) ó detectores de biodegradabilidad que pasado un determinado tiempo muestran que el producto está obsoleto.
Desde el material
- Celulosa: la búsqueda por reducir el impacto ambiental que genera el desperdicio de envases permitió mejorar la calidad de la pulpa y de la impresión de la celulosa para recuperar su uso no sólo como material para envasar huevos sino también como amortiguación para empaques de computadoras, en reemplazo del polietileno expandido.
Este insumo tiene gran poder de reciclabilidad con bajos niveles de emisión, lo que permite generar nuevas posibilidades en el desarrollo a través de tratamientos que permiten tener textura y colores diferenciados. - Bioplástico: utilización de biopolímeros extraídos de moléculas de materiales vegetales, por lo general de cereales (maíz, cebada, sorgo), que son totalmente orgánicos.