La preocupación que ocupa las agendas en el medio empresarial es la sostenibilidad. En la industria del packaging no podía ser de otra manera.
- En España la responsabilidad en la gestión de los envases se convierte en un asunto de interés nacional y de cumplimiento obligado.
Esto ha sido así desde la reciente publicación de la Ley de residuos y suelos contaminados en abril de este mismo año. Además, se suma el Real Decreto de envases y residuos de envases por aprobar.
La integración de los cambios normativos afectará a la estructura de muchas organizaciones, y para adelantarse a estos cambios se necesitan instrumentos con los que batallar.
Desde el 2018, en España se decretó obligatoria la memoria anual de responsabilidad social y sostenibilidad de las empresas, organizaciones y administraciones públicas.
- El objetivo principal de esta normativa es apoyar a las prácticas responsables que constituyan un motor significativo de la competitividad del país.
Así como su transformación hacia una sociedad y una economía más productiva y sostenible.
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La sostenibilidad en la industria del packaging
La industria del packaging lleva más de una década introduciendo innovaciones en el ámbito de la sostenibilidad, incorporando procesos, prácticas y materiales que minimicen el impacto de su actividad en el entorno.
Sin embargo, conceptos como ecodiseño, reducción, reutilización y reciclaje, que este sector ya ponía a disposición de la innovación de las marcas, ganan protagonismo y son necesarios para la economía circular.
La transformación del estilo de vida, los hábitos de consumo y los canales de compra a raíz de la pandemia, aumentaron la demanda de productos envasados. Tanto en el comercio físico y online como en el sector de la hostelería y restauración.
En este camino hacia una mayor sostenibilidad del packaging, el debate parece centrado en la reducción de los materiales y en la eliminación del plástico.
Cualquier material de envase debe utilizarse optimizando al máximo los recursos para conseguir la menor huella ambiental posible.
Pero lo necesario será enfocar correctamente la parte de concepción y diseño del envase. Para ello, resulta esencial realizar un análisis que contemple todo el ciclo de vida del packaging.
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