La prohibición de entregar bolsas de polietileno en centro comerciales del Distrito Federal no es ninguna solución al problema ambiental, afirmó el ingeniero químico Jorge Barrera, director de ventas de negocio de plástico de Dow Química Mexicana.
“Trata de atacar un problema más visual que real, ahora el problema de esa medida es que no esta basada en estudios reales, desde mi punto de vista y también esta causando, un temor a reciclar esos plásticos porque ya tienen un aditivo que lo esta oxodegradando”, afirmó.
El ataque a las bolsas de polietileno
Al disertar la conferencia sustentabilidad en la producción y consumo de plásticos dentro de la Semana de Mejora 2010 de Pemex petroquímica, el especialista explicó que a nivel nacional este material apenas representa el 6% de los desechos en los rellenos sanitarios, cuando el 57% es basura orgánica.
Señaló que en los últimos años se ha atacado al polietileno, como un fuerte contaminante ambiental, cuando la realidad es otra y se deben de tomar acciones, para disminuir la biodegradación de productos orgánicos.
Dijo que una de las políticas que se deben de cambiar es la eliminación de rellenos sanitarios en el país, porque es en donde existe el mayor problema de contaminación, por el método que se utiliza.
Explicó que sólo el 4% del petróleo se utiliza en la producción de polietilenos, del cual apenas el 35% se usa para bolsas y empaques, mientras que con el resto se producen otros productos.
Educación del consumidor, necesaria
Propuso que el gobierno aplique un programa para educar a los consumidores, para que hagan uso racional de este producto.
Además, pidió fomentar la instalación de empresas que se encarguen de su recuperación energética, para extraer el 80% de energía que posen en su interior.
“Tenemos que trabajar mucho en la educación de la gente, el polietileno, el polipropileno o cualquier de los plásticos no contamina por si mismos, somos nosotros los seres humanos los que no estamos utilizando adecuadamente los productos y no los estamos desechando adecuadamente”, afirmó.
El egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mencionó que uno de los puntos importantes es reducir su uso, reusarlo y reciclarlo, para disminuir los daños al medio ambiente.
Puso por ejemplo, que a través del proceso de recuperación energética, a una bolsa, se le puede extraer 60 watts de energía, que es suficiente para mantener encendido un foco durante diez minutos.
Fuente: El Golfo