La industria del plástico está tomando conciencia de su actual papel de liderazgo, también social, y de la responsabilidad que conlleva.
- Las mejoras cotidianas ya no puede garantizar por sí solo el éxito económico. Tal como ocurrió con el rápido ascenso de la tecnología en el siglo pasado.
Se tiene que salir de la zona de confort y asegurar la sostenibilidad de las actividades para las generaciones futuras.
La industria demostrará de forma comprensible que los materiales poliméricos no son el problema, sino que contribuyen a la solución en la mayoría de los casos.
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Economía circular: la industria se mueve a nivel global
Ninguna otra tarea ha tenido tan ocupada a la industria del plástico en los últimos años como el desarrollo de una economía circular que funcione para los materiales poliméricos.
Se observa un cambio de rumbo en las grandes empresas del sector de la producción. En particular, las empresas europeas han adquirido en muchos casos empresas de reciclaje de plásticos.
Las cuales habían desarrollado soluciones de alta calidad para el reciclaje postconsumo (PCR) en los años anteriores.
La visión: Nuevos tipos de materiales, como mínimo, con proporciones de materias primas de PCR. Cuya calidad esté garantizada al mismo nivel que la de los productos primarios, y cuyo uso sea fácil y seguro para cualquier procesador.
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El diseño para el reciclaje plástico
Durante décadas la industria del plástico tuvo que diseñar y construir productos primarios exclusivamente para cumplir con eficacia todos los requisitos de los clientes para poder operar con éxito.
- El resultado, en muchos casos, son compuestos hechos con materiales que son incompatibles con el reciclaje.
Los materiales que se recuperan de las recogidas generales después de la utilización del producto están demasiado mezclados para ser procesados de forma rentable.
Para mejorar fundamentalmente esta situación, los aspectos necesarios para el reciclaje después del uso deben incorporarse ya en el diseño, desarrollo y fabricación de los productos primarios.
Así pues, el diseño de productos respetuosos con el reciclaje se está convirtiendo cada vez más en un “facilitador” para el desarrollo de una economía circular sostenible de los polímeros.
Esta tarea afecta a toda la cadena de valor, desde la producción de materiales, la fabricación de maquinaria y el procesamiento, hasta los usuarios de los productos y la posterior recogida, clasificación y reciclaje.
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