Promover el uso de plásticos reciclados en la industria alimentaria es una iniciativa esencial para avanzar hacia una economía más circular y sostenible.
Las empresas que adoptan estas prácticas no solo contribuyen a la reducción de residuos y la conservación de recursos naturales, sino que también responden a la creciente demanda de los consumidores por productos más ecológicos y responsables.
En ese sentido, Plastics Europe y Anarpla, crearon la iniciativa de crear una Guía de Buenas Prácticas para la Compra Verde y la Promoción de Productos Plásticos reciclados.
Con la llegada del Pacto Verde Europeo, el objetivo de que Europa sea climáticamente neutra para 2050 y tener una recuperación económica post pandemia basada en la economía verde y la transición digital, la Unión Europea acelerará la transición a una economía circular.
Una transición fundada en el máximo aprovechamiento de los recursos naturales disponibles, con próximas normativas que obligarán a una adaptación sin precedentes a toda la sociedad y a la administración, que liderará con el ejemplo en su compra pública.
Economía circular impulsada desde el sector público a toda la industria
De acuerdo con el organismo, la Compra Pública Verde se define en la comunicación de la Comisión Europea sobre Contratación pública para un medio ambiente mejor, como un proceso por el cual las autoridades intentan adquirir productos, servicios y obras con un impacto ambiental reducido durante su ciclo de vida.
El objetivo de iniciativas como esta guía, es que sean una herramienta fundamental en la transición hacia una economía circular, donde los residuos se conviertan en verdaderos recursos.
El compromiso de ambas asociaciones pasa por colaborar y apoyar a las diferentes Administraciones Públicas, en especial a las entidades locales, para que en el desarrollo de la actividad de contratación sea posible garantizar que los plásticos continúen proporcionando importantes beneficios necesarios para la sociedad, a la vez que se minimiza su huella medioambiental.
Adopción de plásticos reciclados en la industria de alimentos
La adopción de plásticos reciclados puede ayudar a minimizar el impacto ambiental y generar una imagen más sostenible de la marca. Para lo cual se deben tener en cuenta una serie de estrategias como:
- Certificación de materiales: Implementar estándares de certificación como Global Recycled Standard (GRS) o RecyClass, que verifican el contenido reciclado y aseguran la calidad y la trazabilidad de los materiales reciclados.
- Cumplimiento de normativas: Asegurarse de que los plásticos reciclados cumplan con las regulaciones de seguridad alimentaria, como las establecidas por la FDA en Estados Unidos y la EFSA en Europa.
- Reciclaje avanzado: Invertir en tecnologías de reciclaje avanzado, como el reciclaje químico, que pueden procesar plásticos contaminados o mixtos para producir resinas recicladas de alta calidad aptas para uso alimentario.
- Mejorar la cadena de suministro: Colaborar con empresas de reciclaje para garantizar un suministro constante y de alta calidad de plásticos reciclados.
- Alianzas con recicladores: Establecer alianzas estratégicas con empresas de reciclaje para asegurar el suministro de materiales reciclados de calidad.
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