Se espera que en este año haya avances, tanto en Estados Unidos como en Europa, en la regulación de PFAS (per and polyfluoroalkyl substances), que son sustancias químicas sintéticas que se utilizan en la industria de procesamiento y empaque de alimentos.
Lillian Peregrina, directora de Productos en TÜV Rheinland, explicó que se encuentra en análisis cuáles pueden reemplazarse, cuáles ya las van a prohibir completamente y cuales tendrán que esperar.
Este grupo de sustancias químicas sintéticas tienen la capacidad de repeler el agua, el aceite y las manchas. Esto los hace ideales para ser usados en empaques de alimentos, especialmente aquellos que requieren propiedades de impermeabilidad o resistencia al calor, como las bolsas de comida rápida, los envases de leche o empaques de alimentos.
El problema, explicó, es que estos compuestos no se descomponen fácilmente en el ambiente y ha sido asociado con problemas de salud, como cáncer, alteraciones en el desarrollo, problemas en la tiroides, entre otros.
Por lo anterior, Estados Unidos y Europa están tomando medidas para regular y eliminar estos productos en empaques de alimentos, utensilios de cocina, y equipos que estén en contacto directo con los alimentos.
En el caso de Estados Unidos, por ejemplo, aunque no existe una regulación federal única sobre los PFAS en empaques, varios estados están implementando leyes que prohíben.
Lillian Peregrina comentó que el 1 de enero de 2026 entra en vigor la prohibición en empaques de alimentos en muchos estados, y para 2028 se espera que también se prohíban en utensilios de cocina.
Actualmente, en México no hay una regulación específica que aborde los PFAS en los empaques de alimentos, aseguró.
Empaques se verán afectados por posible prohibición
Detalló que los empaques de alimentos más comunes que contienen PFAS son aquellos con recubrimientos especiales, como las bolsas para comida rápida, envolturas para las palomitas de microondas, café, empaques de comida para llevar, así como los envases tipo Tetra Pak.
Estos materiales se utilizan porque ayudan a mantener la temperatura, así como prevenir la absorción de grasa o agua, y en algunos casos, aumentan la durabilidad del empaque.
Sin embargo, estos son los que se verán afectados por las nuevas regulaciones, ya que las sustancias químicas pueden migrar a los alimentos.
“Va a ser muy difícil para la industria poder sustituirlo, porque se supone que esas sustancias son para que duren y si las estás quitando o simplemente esa propiedad ya no va a durar”, dijo la entrevistada.
En algunos casos, prosiguió, las marcas ya están reemplazando los recubrimientos basados en PFAS por opciones más sostenibles, como ceras naturales, resinas de origen vegetal o recubrimientos biodegradables.
Aunque no es una tarea sencilla, ya se están viendo avances. Algunas marcas de empaques están implementando tecnologías que permiten la creación de barreras sin el uso de productos químicos peligrosos.
Por ejemplo, los sártenes con recubrimiento de teflón, que contienen PFAS, están siendo sustituidos por materiales como acero inoxidable, cerámica o latón.
Estos materiales, aunque seguros, no ofrecen las mismas propiedades antiadherentes o de larga duración que el teflón.
En el caso de los empaques de comida rápida, la industria podría enfrentarse a la necesidad de eliminar los recubrimientos impermeables y sustituirlos por opciones más sustentables, lo que podría impactar en la experiencia del consumidor.
Los costos de investigación y desarrollo para encontrar sustitutos adecuados también representan un desafío significativo para las empresas, especialmente aquellas que operan a gran escala.
Proceso de evaluación
Las pruebas de laboratorio para detectar PFAS y BPA en envases de alimentos son fundamentales para garantizar que los productos sean seguros para el consumo, anotó Lillian Peregrina.
Estas generalmente implican la detección cualitativa y cuantitativa de flúor y otros elementos asociados con los PFAS.
Las técnicas utilizadas pueden identificar la presencia de estos químicos en niveles muy bajos, a menudo en partes por billón.
Las empresas que fabrican estos productos deben someter sus envases a pruebas de determinación química para verificar que no contengan sustancias peligrosas.
En muchos casos, los fabricantes no son conscientes de que sus proveedores de materiales incluyen PFAS en los productos que suministran, lo que hace que las pruebas sean esenciales para asegurar el cumplimiento de las regulaciones.
Por lo que las empresas que fabrican envases de comida y utensilios de cocina deberán tomar medidas para adaptarse a la nueva normativa y reemplazar los productos que contienen este grupo de químicos.
La diversificación y la inversión en investigación y desarrollo son importantes para encontrar soluciones sostenibles y seguras. Esto podría incluir el desarrollo de nuevos materiales que ofrezcan características similares a los plásticos tradicionales, pero sin los riesgos asociados.
Estados con regulación en Estados Unidos
Colorado: A partir del 1 de enero de 2024.
Empaque de alimentos: un envase o componente de empaque utilizado en contacto directo con alimentos y compuesto, en gran medida, de papel, cartón u otros materiales derivados originalmente de fibras vegetales.
El 1 de enero de 2026 aplicarán normas para utensilios de cocina y el 1 de enero de 2028. para equipos para alimentos, así como entornos comerciales que están en contacto directo con alimentos.
Connecticut: 1 de enero de 2028
Utensilios de cocina: Artículos duraderos para preparar, dispensar o almacenar alimentos, comestibles o bebidas.
Maine: 1 de enero de 2026 aplicará una norma sobre utensilios de cocina que contengan PFAS añadidos intencionalmente.
Minnesota: 1 de enero de 2025
Utensilios de cocina: Artículos duraderos para preparar, dispensar o almacenar alimentos, comestibles o bebidas, como ollas, sartenes, parrillas, bandejas de hornear, moldes, bandejas, tazones y utensilios de cocina.
El 1 de enero de 2032: Todos los productos. No se puede vender, ofrecer a la venta o distribuir en este estado ningún producto que contenga PFAS añadidos intencionalmente, a menos que el comisionado determine que el uso de PFAS es actualmente inevitable.
Rhode Island: 1 de enero de 2027
Utensilios de cocina duraderos que se utilizan en hogares y restaurantes para preparar, dispensar o almacenar alimentos, comestibles o bebidas.
Próximas leyes con fechas tentativas
California: A partir del 1 de enero de 2026 se prohibirá Cualquier empaque de plástico con PFAS o PVC añadidos intencionalmente. 1 de enero de 2030: Todos los productos con PFAS añadidos intencionalmente.
Illinois: 1 de enero de 2025: Utensilios de cocina duraderos para preparar, dispensar o almacenar alimentos, comestibles o bebidas.
Massachusetts: 1 de enero de 2026 y 2027 afectará a utensilios de cocina duraderos usados en hogares y restaurantes, incluye ollas, sartenes, parrillas, bandejas, moldes, tazones y utensilios de cocina. El 1 de enero de 2030: Todos los productos con PFAS añadidos intencionalmente.
Michigan: 1 de enero de 2027 aplicarán en utensilios de cocina duraderos usados en hogares y establecimientos de alimentos. 1 de enero de 2032 en todos los productos con PFAS añadidos intencionalmente.
New York: 1 de enero de 2026 se normará en utensilios de cocina duraderos para hogares, restaurantes y cocinas comerciales.
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