Coca-Cola en Alemania apuesta por una línea de botellas de vidrio retornable para optimizar procesos de clasificación altamente complejos.
Llenamos un total de seis botellas diferentes en esta línea: cuatro en formato de 200 ml y dos en formato de 330 mililitros”, explica Christopher Bee, gerente de planta en las instalaciones de Mannheim.
Los tamaños más pequeños se destinan principalmente al sector de la hostelería, donde el embalaje tiene que ser un poco más impresionante que para el comercio minorista.
El sistema de clasificación en línea de KHS puede alimentar las botellas vacías por tipo para un proceso de lavado y llenado completamente automático.
En principio, los procesos de clasificación y llenado tienen lugar en dos sistemas separados.
Usan un segmento para combinar ambas secciones específicamente para sus principales productos como las botellas de Coca-Cola de 200 y 330 mililitros.
Te puede interesar: Uso de envases reutilizables, la meta de Coca-Cola para 2030
Botellas de vidrio y su alta flexibilidad
El retorno irregular de "vacíos" a menudo resulta en picos, por ejemplo después de los festivales de música.
De acuerdo con Bee, lo especial de este sistema es que puede reaccionar individualmente a estos picos.
Para facilitar esto, durante la puesta en marcha se realiza una simulación en vivo con un proveedor de servicios externo.
Sobre la base de los resultados, en estrecha colaboración con KHS, pudimos realizar una serie de optimizaciones y ajustes finos en el diseño que mejoraron el rendimiento”, agrega.
Lo más destacado de la nueva línea de vidrio retornable de KHS es la lavadora de botellas de dos extremos Innoclean DM.
De media, ahorran hasta un 40% en agua y energía por cada botella llena en comparación con los sistemas de generaciones anteriores.
Te puede interesar: El vidrio es reconocido como el material de envasado más seguro para alimentos
Este ahorro es posible gracias al control de agua dulce, que se ajusta automáticamente a la capacidad actual de la máquina mediante una válvula de control.
Los nuevos portabotellas ECO también benefician el balance energético al pesar alrededor de una cuarta parte menos que los portabotellas anteriores.
Esta función reduce la cantidad de sosa cáustica y calor remanente y, por lo tanto, el requisito de enfriamiento dentro de la máquina.
La lavadora de botellas cambia a un estado inactivo de ahorro de energía: su nuevo modo de espera.
Con este fin, el sistema de pulverización Liquid Efficiency reduce la presión de las bombas de pulverización durante el tiempo de inactividad. Por lo tanto, reduce el consumo de electricidad hasta en un 80 %.
Te puede interesar: Inauguran línea de producción para etiquetas termorretráctiles flotantes y sostenibles