La manzana es una de las frutas más completas y saludables que se conocen por su contenido en hidratos de carbono, fibra, vitaminas y potasio.
Uno de los beneficios de la manzana es que evita la subida de peso. Esto se debe a que regula los niveles de azúcar en sangre, tiene efecto saciante y posee propiedades diuréticas y depurativas. Además, es una buena aliada tanto en casos de estreñimiento como de descomposición, puesto que la pectina es una fibra soluble que regula el intestino.
Remedios naturales, la califican como ideal en caso de afecciones pulmonares, mezclada con una cucharada de miel para cortar la tos, para la higiene bucal de las encías, en caso de agotamiento físico e intelectual, en caso de gota, como excelente antidiarreico, sin embargo siempre es importante visitar al médico en caso de tener alguna de estas enfermedades.
Las investigaciones sobre los desechos de manzana
Un equipo de investigación liderado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha estudiado en profundidad el subproducto que generan los desechos de la manzana en la elaboración de zumo y sidra y ha demostrado su alto contenido en fibra y sus propiedades prebióticas.
“Viendo el gran potencial de este subproducto, hemos estudiado algunas aproximaciones para revalorizarlo. Hemos visto que la alta presión hidrostática estabiliza el producto aumentando su vida útil y que, además, aumenta la fracción de fibra y mejora su capacidad para atrapar grasa y su aptitud tecnológica”, explica Inmaculada Mateos-Aparicio, profesora e investigadora del Departamento de Nutrición y Ciencia de los Alimentos de la UCM.
De acuerdo con los expertos, es necesario el uso de una tecnología sostenible para alargar la vida útil de estos desperdicios que, por su rápido deterioro, no pueden aprovecharse para el consumo humano y son desechados.