Montevideo, (EFE).- Uruguay atraviesa la peor crisis hídrica de su historia y convive con una prolongada sequía que llevó a que prácticamente se agotara el agua dulce de la principal reserva que abastece a Montevideo.
Pese a que en los últimos días la represa de Paso Severino pudo aumentar su caudal de agua, lo cierto es que en este momento solo tienes poco más de 1.500.000 de los 67.000.000 de metros cúbicos que tenía en su embalse en noviembre de 2022.
De acuerdo con esto, el Río Santa Lucía y el Río de la Plata son ahora los dos principales encargados de hacer que el agua llegue a los departamentos (provincias) de Montevideo y Canelones a través de la planta potabilizadora de Aguas Corrientes.
Ubicada a 56 kilómetros de la capital del país, esta abastece a cerca de 1.700.000 de las aproximadamente 3.500.000 de personas que habitan el país suramericano.
La llegada de agua desde esos dos ríos llevó a que el sodio y el cloruro del agua que sale por las canillas aumentara, algo que fue autorizado por el Ministerio de Salud Pública en abril.
En este momento, los valores máximos permitidos son de 720 miligramos de cloruro por litro de agua y de 440 miligramos de sodio por litro de agua.
No obstante, ante este hecho, la cartera hizo diversas recomendaciones sobre el consumo de esta en niños, mujeres embarazadas y personas con determinadas enfermedades.
Seguro te interesa: El Gobierno de Uruguay asegura que la calidad del agua "no se va a modificar"
Emergencia hidrica
El pasado 19 de junio, el Gobierno de Uruguay decretó la emergencia hídrica en el área metropolitana.
Y a finales de 2022 se decretó una emergencia agropecuaria para la ganadería, la lechería, la horticultura, la fruticultura y la agricultura por una prolongada sequía.
Esta última decisión fue acompañada de diversas medidas como la entrega de partidas de dinero para la compra de agua a determinados grupos de sectores vulnerables y la exoneración impositiva para el agua embotellada.
Esto llevó a que un bidón de 6,25 litros de agua pasara de 129 pesos uruguayos (3,27 dólares) a 89 pesos (2,25 dólares).
Además, se anunció la creación del Fondo de Emergencia Hídrica y la construcción de una obra para llevar agua del río San José a planta potabilizadora de Aguas Corrientes.
El Río San José y la lluvia
El pasado 20 de junio, Obras Sanitarias del Estado, el organismo estatal responsable del abastecimiento de agua potable en todo el territorio, comenzó a ejecutar dicha obra, que se espera que esté terminada en los últimos días de julio o en los primeros de agosto.
Para poder llevarla a cabo se están importando caños desde Brasil que permitirán construir una tubería de 13,5 kilómetros con capacidad para llevar entre 150.000 y 200.000 metros cúbicos de agua dulce por día.
Por otra parte, en los últimos días las lluvias ayudaron a que aumentaran las reservas de agua dulce.
Según el Instituto Uruguayo de Meteorología, entre el 4 de julio y el 7 de julio el acumulado de agua fue de 39,2 milímetros en Paso Severino y de 40,5 milímetros en la parte más próxima a Aguas Corrientes del Río Santa Lucía.
No obstante, el informe de Tendencias Climáticas para los meses de julio, agosto y septiembre que presentó sostiene que la probabilidad de precipitaciones para el sur del país es más baja de lo normal.
Discusiones y opiniones
El problema del agua también ha generado diversas discusiones y opiniones en el país suramericano.
A nivel político, el oficialismo y la oposición se han acusado mutuamente por obras que no se llevaron a cabo en el pasado.
Mientras tanto, una encuesta hecha entre el 21 y el 28 de junio por la empresa Factum mostró que el 41% de quienes respondieron opina que la responsabilidad de lo que sucede es del actual Gobierno y también de los anteriores.
Por su parte, un 15% cree que es del actual Gobierno por suspender la represa que se podía construir en la localidad de Casupá y un 32% asegura que es de anteriores Gobiernos por no haber hecho esa obra u otras.
Un 11% no adjudicó responsabilidades y apuntó que lo que sucede es un fenómeno de la naturaleza.
A nivel internacional, en los últimos días los presidentes de Argentina y Venezuela hablaron sobre la situación de Uruguay e incluso ofrecieron su ayuda.
No obstante, el argentino Alberto Fernández dijo en una rueda de prensa que en Montevideo no sale agua cuando se abren las canillas, lo que generó una respuesta por parte del mandatario uruguayo, Luis Lacalle Pou.
"Puede ser dos razones: mala intención, que la descarto, o por ignorancia, simplemente", respondió tras ser consultado sobre este tema en una rueda de prensa. Santiago Carbone.