Sándwiches, frutas y snacks, los favoritos para el lunch escolar, revela encuesta

Según un estudio reciente realizado por Ipsos Digital para Amazon Fresh, los hábitos alimenticios de los niños en edad escolar está cambiando. 

Para el 68% de los padres encuestados en España, los almuerzos y lunch actuales son más saludables que los que ellos consumían durante su infancia. Mientras que un 20% no percibe diferencia en cuanto a calidad nutricional.

El estudio destaca que el 63% de las familias optan por snacks o sándwiches, así como fruta como las tres principales opciones para llevar a las escuelas. Les siguen en gusto los jugos, galletas, yogures, y bebidas a base de yogurt.

Uno de los principales factores que influye en la elección de los alimentos es la preferencia de los niños. Es por ello que el 60% de los padres afirma que seleccionan los alimentos que más le gustan a sus hijos. 

No obstante, la salud sigue siendo un criterio importante, con el 55% de los papás eligiendo opciones que consideran más saludables. 

Además, un 26% menciona que sus hijos piden llevar lo mismo que ven en sus compañeros. Otro 17% destaca que los pequeños participan activamente en la preparación de su almuerzo o merienda.

Las escuelas también están jugando un papel crucial en fomentar hábitos alimenticios saludables. 

A pesar de que la mayoría de los colegios permiten que los niños lleven el desayuno o lunch que prefieran, se han impulsado iniciativas para fomentar hábitos más saludables. 

Un 27% de los encuestados afirma que en los colegios de sus hijos hay al menos un día dedicado a la fruta, mientras que un 19% menciona que el centro escolar proporciona un calendario con sugerencias de alimentos para llevar.

Aunque el 82% de las familias preparan el almuerzo en casa, un 7% señala que es el colegio quien provee el alimento a los niños.

Cambios en la percepción de la alimentación

El estudio también revela una reflexión sobre cómo ha cambiado la percepción de los padres respecto a los alimentos que consumen sus hijos, en comparación con las que ellos mismos llevaban años atrás. 

Si bien la mayoría cree que hoy en día los alimentos son más saludables, el debate sobre la calidad nutricional de los almuerzos escolares sigue presente en los hogares.

Alimentos más consumidos en escuelas, según estudio encargado por Amazon:

• 63% sandwiches y snacks
• 63% Fruta 
• 39% jugos
• 35% galletas
• 33% bebidas de yogurt
• 28% yogurt

Este estudio no solo refleja un cambio en los hábitos alimenticios, sino también una mayor conciencia sobre la importancia de una nutrición equilibrada desde edades tempranas. 

Papás influyen en los hábitos de consumo de hijos

Un estudio publicado por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos demostró que los padres ejercen una fuerte influencia en la nutrición de sus hijos.

Los hijos de padres conscientes de la nutrición tienden a comer de manera más saludable y demuestran una alta conciencia nutricional. 

Por el contrario, los hijos de padres ocupados que carecen de tiempo para la preparación de comidas replican con más frecuencia los errores nutricionales de sus padres. 

Estos hallazgos enfatizan la importancia del entorno familiar para dar forma a los comportamientos dietéticos de los niños y jóvenes.

Por lo que sugiere que las iniciativas que promueven la nutrición adecuada y un estilo de vida saludable deben comenzar con los padres. 

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“El método y la calidad de la nutrición no solo influyen en el desarrollo físico de un niño, sino que también en su desarrollo intelectual, emocional y social, así como en su capacidad de aprendizaje y resultados escolares”, destacan los investigadores.

Agregan que la importancia de una selección de alimentos más naturales durante la infancia y la adolescencia, ya que son un periodo crítico para la formación de hábitos y comportamientos dietéticos que persisten a lo largo de la vida. 

Por lo que el consumo de dulces, comida rápida, bebidas azucaradas y la adición excesiva de sal y azúcar a bebidas y platos puede conducir al desarrollo de comportamientos dietéticos desfavorables. Esto, a su vez, puede llevar a la aparición de afecciones de inicio en adultos, incluyendo sobrepeso, obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares.

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