La tercera edición del Festejo de Sabor de la Tierra, organizado por Arca Tierra, una red local de personas expertas que promueven la buena alimentación a través de la agricultura regenerativa y el comercio justo, es un evento de la industria alimentaria mexicana que refleja la importancia de la agricultura sostenible y la preservación de los ingredientes tradicionales locales.
Este evento, además de recordar la rica diversidad alimentaria de México, también destaca el papel de los pequeños productores y la agricultura campesina en la seguridad alimentaria del país.
El impacto de este evento en la industria alimentaria es significativo porque promueve la agricultura sostenible.
Al reunir a chefs y productores comprometidos con la sostenibilidad, el evento fomenta prácticas agrícolas más respetuosas con el medio ambiente, lo que podría influir en las tendencias de producción a largo plazo.
La participación de chefs reconocidos, de diferentes regiones de México, brinda una plataforma para que los productores locales muestren sus productos y potencialmente amplíen sus mercados.
Las ponencias sobre agricultura campesina, cocina regional y conservación de especies endémicas, educan al público sobre la importancia de estas prácticas, lo que puede influir en las decisiones de compra de los consumidores.
Eventos de este tipo ayudan a fortalecer la cadena de suministro local, ya que permite conectar a chefs con productores locales. El evento fomenta relaciones comerciales dentro de la industria alimentaria local.
La colaboración entre chefs y productores es relevante porque a partir de esta se pueden lograr innovaciones en la cocina mexicana, manteniendo vivas las tradiciones mientras se adaptan a las demandas actuales.
Un día para impulsar la diversidad agrícola
Al coincidir con el Día Nacional del Maíz, el evento resalta la importancia de conservar la biodiversidad agrícola de México, clave para la seguridad alimentaria nacional.
El 29 de septiembre se celebra el Día Nacional del Maíz en México, una fecha que busca reconocer el papel que este grano tiene en la alimentación nacional.
También ayuda a recordar parte de la tradición que hay detrás de las 64 razas que hay en México y de las que tenemos la dicha de que 59 son nativas, de acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
El maíz es un cereal versátil. Sus características varían según el terreno y la altitud en la que se cultiva. Por eso hay una gama de especies, como el maíz reventador para preparar palomitas, con subvariedades como el toluqueño, chapalote, nal-tel, Chihuahua, Jalisco y arrocillo.
Con el maíz cacahuazintle se elabora el tradicional pozole; el maíz azul destaca por su rica concentración de nutrientes. El maíz blanco se emplea principalmente para la producción de tortillas. El amarillo es utilizado para fabricar cereales tostados, esquites y forraje.
También da lugar a una variedad de productos derivados, como el jarabe de maíz, que se utiliza como endulzante. El aceite de maíz, para cocinar; la harina nixtamalizada, para la preparación de tamales; y la harina de fécula de maíz se usa para preparar atoles, dulces de leche y sopas.
Un informe de expectativas agroalimentarias de la Secretaría de Agricultura (Sader) consignó que México produciría 25.15 millones de toneladas de maíz durante el año agrícola, que va de octubre de 2023 a marzo del 2025.
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