- De acuerdo con la ONU, las mujeres representan más del 40% de la fuerza laboral agrícola en los países que se encuentran en vías de desarrollo y son responsables de más de 50% de la producción de alimentos.
Sin embargo, se enfrentan a desafíos como la carencia de posesión de tierras, capacitaciones y financiamientos para impulsar su economía familiar.
Además, las mujeres tienen menor acceso a la tierra y a programas de financiamiento y capacitación como agricultoras, según datos del Instituto Nacional de las Mujeres.
De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), solo un 30% de las mujeres poseen tierras agrícolas y apenas el 5% tiene acceso a la asistencia técnica, lo cual limita sus oportunidades a desarrollarse adecuadamente.
En México, el 56% de las mujeres rurales en el país se encuentra en situación de pobreza y tienen en promedio 2.4 años menos de escolarización a diferencia de las mujeres que viven en núcleos urbanos.
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El papel fundamental de las mujeres en la seguridad alimentaria
Durante el webinar: “Mujeres que Cultivan Futuro para el agro de América Latina”, jugadoras del sector puntualizaron la importancia de sensibilizar a toda la sociedad sobre el valor que representa la participación de la mujer en la seguridad alimentaria, así como visibilizar la importancia de contar con los recursos y apoyo suficientes para desarrollar su trabajo en el campo.
Uno de los desafíos a los que las mujeres se enfrentan son los paradigmas que existen alrededor de las mujeres, sobre el trabajo que se cree pueden desempeñar y las limitaciones impuestas por la sociedad”, indicó Natalia Villalobos, gerente de marketing de Yara Centroamérica.
En Latinoamérica, se tiene la noción de que las actividades del campo están hechas para los hombres, así como las facilidades de apoyos y de tenencia de la tierra. Por esto, las mujeres perciben que su trabajo es invisible para la sociedad. Esto habla de la necesidad de aumentar el reconocimiento de su trabajo, por lo que, uno de los mayores desafíos que enfrentan es la valorización.
La necesidad de tener equidad de género en el campo
Las mujeres rurales asumen el papel de transmitir sus conocimientos y capacitar a las nuevas generaciones con base en buenas prácticas que permitan el adecuado cuidado del suelo y garantizar la seguridad alimentaria, por esto, es esencial proporcionarles las herramientas y conocimientos técnicos necesarios para lograr la seguridad alimentaria mundial.
La igualdad de género se debe entender como una necesidad, implementar y fomentar una cultura de respeto y valores desde casa, acompañado de un proceso de trabajo articulado entre sector público y privado que permita la creación de programas que involucren a la mujer”, indicó Lady Boada, agricultora de 6 hectáreas de cacao y plátano en Ecuador.
Según el Instituto Nacional de Mujeres, las agricultoras producen entre el 60 y el 80% de los alimentos de los países en desarrollo y la mitad de los de todo el mundo, para continuar con esta participación es necesario que miembros del sector fomenten capacitaciones que promuevan su empoderamiento en la industria y contribuyan en la formación del futuro alimentario positivo para la naturaleza.
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