Por segundo año consecutivo, Copefrut presenta su Reporte de Sostenibilidad, destacando avances en ámbitos ambientales y sociales.
El informe resalta su compromiso con la agricultura sostenible, la protección de ecosistemas y el bienestar de las comunidades donde opera, así como en toda su cadena de valor.
Algunos de los resultados de la empresa chilena exportadora de fruta (como el kiwi, cerezas, ciruelas) fue alcanzar el certificado carbono neutral de sus manzanas orgánicas.
Esto se logró gracias a la mitigación de la huella de carbono en la producción, procesamiento y transporte del producto hacia Estados Unidos y Europa, a través de la compra de bonos para la compensación de emisiones de gases de efecto invernadero.
Logró aumentar la capacidad de proceso en la planta Cenlinares, a través de la instalación de una nueva línea de cerezas de 28 vías, con lo cual agregará más de 6 millones de kilogramos de esta fruta por temporada.
La empresa ha reforzado su Sistema de Gestión de Energía con el objetivo de disminuir el impacto de sus operaciones en el consumo energético.
En la temporada 2022-2023, el 96.2 por ciento de la fruta de Copefrut obtuvo la certificación GRASP, avalando la responsabilidad ético-social de sus productores.
Esta certificación, complemento de GLOBALG.A.P. con reconocimiento internacional, aborda aspectos sociales basados en los acuerdos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En la pasada temporada, la exportación de casi 71 mil toneladas de fruta a más de 40 países en los cinco continentes, robusteciendo su presencia comercial en Asia, uno de sus principales mercados.
La empresa envía cinco especies de exportación, gracias al trabajo con más 210 productores nacionales y una dotación de 279 trabajadores y trabajadoras, y más de dos mil personas en labores de temporada.
"En Copefrut, continuamos incentivando una producción respetuosa con los ecosistemas, tanto en nuestras instalaciones como en los huertos, introduciendo prácticas sostenibles e innovadoras que garanticen la calidad de nuestros productos y la eficiencia de nuestro trabajo", explicó Andrés Fuenzalida, gerente general de Copefrut.
Cuidado del agua y energía
La compañía estableció un Sistema de Gestión Hídrica en sus plantas, basado en la reducción del consumo y la reutilización del agua.
Durante la temporada 2022-2023 ejecutó la primera parte del proyecto que consistió en un diagnóstico detallado de los equipos y procesos consumidores de agua.
Para la próxima temporada se espera que se ejecute el plan de gestión, estableciendo medidas específicas que disminuyan el consumo de agua en sus operaciones.
En materia de ahorro de energía, la productora chilena de manzanas informó que el 89% del total de su consumo de energía proviene de fuentes renovables.
Desde 2021 se ha certificado con el sello “Green Energy” de Enel, que acredita que el 100% de la energía consumida procedente de red ha sido inyectada al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) por fuentes de generación de Energías Renovables No Convencionales.
Su principal objetivo es reducir el consumo energético. Por ello, desde el año 2022 ha implementado un Sistema de Gestión de Energía basado en ISO 50.001 certificado y operando en sus plantas.
En materia de desempeño social, también se realizaron avances en inclusión e igualdad de género, gracias a la implementación de la Política de Inclusión y Diversidad, que tiene por objetivo garantizar la igualdad de oportunidades incorporando en cada proceso una visión integradora y orientada en avanzar en materias de no discriminación ya sea por género, edad, nacionalidad o cualquier condición física, social o cultural.
Packaging sostenible
Para la compañía exportadora de frutas, la manera más eficaz de reducir la cantidad de residuos que genera es a través de la innovación en el packaging.
Por ello, su objetivo es reemplazar los embalajes tradicionales por otros más sostenibles y eco-amigables. Sus cajas y esquineros son casi 100% reciclables, por haberse sustituido la ceresina de cobertura por materiales reciclables (barnices acuosos y tintas biodegradables). Los pallets y contenedores de almacenamiento o bins de plástico son reutilizables.
La compañía ha emprendido un proceso que le permitirá, en los próximos tres años, tener el total de sus cajas de material corrugado con la certificación que entrega el Forest Stewardship Council (FSC), organización global sin fines de lucro, que tiene como misión promover un manejo ambientalmente apropiado, socialmente beneficioso y económicamente viable de los bosques del mundo.
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