No necesita ser día del whisky para hablar de él, una de las bebidas espirituales más apasionantes, que entre más descubres, más asombra, es por eso que Glenfiddich ofrece cuatro secretos y curiosidades del whisky.
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¿Diferencia entre Whisky y Whiskey?
La palabra "whisky" se utiliza generalmente para referirse a las bebidas destiladas de malta producidas en Escocia, Canadá y Japón, mientras que término "whiskey" se utiliza para describir las bebidas destiladas de grano o malta producidas en Irlanda y Estados Unidos.
Además de las diferencias geográficas también existen variaciones en los métodos de destilación y en los granos utilizados, lo que contribuye a matices únicos en el sabor y el perfil de cada uno.
¿Qué es el blending en los whiskys?
Muchos de los whiskies más renombrados no son el resultado de un solo destilado, sino de una cuidadosa mezcla de diferentes barricas, el blending es la mezcla de estos, que hacen maestros mezcladores que combinan tipos y líquidos de whiskies para lograr perfiles de sabor excepcionales y complejos.
Por ejemplo, en el caso de Glenfiddich, el whisky se destila con destreza, comprendiendo la importancia del arte de la mezcla para lograr una amplia gama de sabores excepcionales y equilibrados.
Entre las notas que incluyen van desde las frutales como la pera fresca o la manzana horneada, así como caramelo, canela, jengibre e incluso mazapán.
Ritual de añejamiento del whisky
Al igual que en el vino, el lugar donde se cultiva la cebada utilizada en la fabricación del whisky puede influir en su sabor, las bebidas de diferentes regiones geográficas a menudo tienen perfiles de sabor distintivos debido a las diferencias en el clima y el suelo.
El añejamiento de un whisky o tiempo que pasa en barrica le brinda un carácter final, sin embargo, un envejecimiento prolongado no siempre es sinónimo de mejor calidad, el detalle está en encontrar el equilibrio perfecto entre el tiempo y la influencia de la madera.
¿Por qué los whiskys se etiquetan con números?
Esta práctica se originó en las antiguas destilerías escocesas para indicar la edad de un whisky.
Los números en la etiqueta reflejaban el tiempo que esta bebida había pasado en barricas, aunque esta práctica ha evolucionado, los números siguen siendo un sello de autenticidad y calidad en la industria del whisky.