AINIA integra técnicas sensoriales avanzadas para investigar cómo influyen las emociones del consumidor en sus decisiones finales de compra.Las nuevas tecnologías permiten el análisis automático de la expresión facial mediante el uso de algoritmos que identifican en tiempo real las emociones de: felicidad, tristeza, enfado, sorpresa, miedo, desagrado que producen los alimentos.
Las últimas investigaciones realizadas sobre emociones en el contexto de la alimentación, demuestran que la mayoría de las decisiones de compra que los consumidores realizan en alimentación son emocionales; al decidir por un producto existe un componente emocional que influye de manera decisiva en sus elecciones.
Por esta razón, en los últimos años existe un interés creciente en la industria alimentaria por incluir las emociones como un factor determinante en el análisis del comportamiento del consumidor, durante la elección de alimentos.
La industria de la alimentación reconoce que para mejorar el posicionamiento de un producto en el mercado, es necesario conocer con detalle los gustos y preferencias de los consumidores, pero también el componente emocional de su comportamiento.
Las nuevas tecnologías nos permiten acceder a la respuesta más irracional del consumidor a través del análisis automático de la expresión facial en tiempo real, mediante la utilización de algoritmos de visión computarizada.
Estas tecnologías permiten identificar, durante el consumo de los alimentos, seis emociones básicas: felicidad, tristeza, enfado, sorpresa, miedo y desagrado.
En ese sentido, Consumolab, centro de estudios de comportamiento y preferencias del consumidor de AINIA, está desarrollando con el apoyo del IVACE, una innovadora línea de investigación en la que se combinan diferentes metodologías de estudio del comportamiento del consumidor y tecnologías avanzadas de análisis sensorial.
Estos nuevos métodos aportan información de valor a las empresas para el desarrollo de productos que se ajusten a las necesidades reales del mercado, basadas en técnicas más rápidas, flexibles y eficaces. Entre ellas destacan:
-Metodología CATA (Check All That Apply): Los consumidores realizan una cata de diferentes productos y responden a un cuestionario en el que seleccionan de un listado de términos, aquellos que más se ajusten a las sensaciones y emociones que les produce el alimento.
-Tecnología de medición de la expresión facial: Un software de reconocimiento facial registra las micro expresiones del rostro de los consumidores mientras prueban cada producto alimenticio y analiza, mediante algoritmos especiales, la respuesta emocional del consumidor para obtener una valoración más espontánea sobre el alimento que está probando.
Las nuevas metodologías suponen un ahorro importante en costes y tiempo en el diseño de productos para las empresas, pues al trabajar con técnicas más cercanas a las preferencias y demandas reales del consumidor, se reducen los tiempos en el lanzamiento de nuevos productos.
Fuente: AINIA Centro Tecnológico