Análisis químicos demostraron que la sábila contiene vitaminas, minerales, aminoácidos y enzimas que contribuyen a mantener una salud apropiada.Aunque parece un cactus o un agave, la sábila es, de hecho, de la familia del tulipán, del espárrago y del ajo. También conocida como aloe, la sábila crece en zonas áridas y rocosas, donde las lluvias son escasas y la humedad del suelo es baja, es decir, crece en condiciones hostiles, y gracias a esas condiciones desarrolla sus extraordinarias cualidades, ya que está preparada para guardar en sus hojas el jugo o sucus, que la mantiene viva.
Se dice que en la edad media, los caballeros templarios (relacionados con la leyenda del Santo Grial, el Código Da Vinci, etcétera) tomaban una bebida a base de sábila llamada elíxir de Jerusalén, a la que atribuían su buena salud y longevidad.
Análisis químicos han demostrado que la sábila (aloe) contiene vitaminas, minerales, carbohidratos, aminoácidos y enzimas que contribuyen a mantener una salud apropiada. Contiene aproximadamente 14 de 17 minerales esenciales, los cuales son cruciales para el buen funcionamiento del cuerpo e importantes en el proceso de crecimiento. Las enzimas, por su parte, ayudan a procesar y a aprovechar las vitaminas, minerales y nutrientes, además contribuyen a tener una buena salud digestiva.
Fuente: Revista Today de Herbalife, número 137. www.herbalife.com.mx