El sistema agroalimentario es uno de los principales causantes de la emisión de gases de efecto invernadero, pero no todos los alimentos se producen de la misma forma.
Mientras que la carne suele necesitar mucho terreno y agua con un retorno de la inversión muy reducido en cuanto a la cantidad de alimentos que se obtiene, los alimentos vegetales, como el trigo que se usa para hacer la pasta, son mucho más sostenibles.
- La huella de carbono de la pasta es de solo 34,44 g CO2eq/kg (15,5 oz CO2eq/lb), mucho menor que la de otros alimentos.
- Por el contrario, la carne roja tiene una enorme huella de carbono de 359.3 oz C02eq/lb.
Entre los alimentos de origen vegetal, los cereales son los mejores para el medio ambiente, ya que requieren muy poca cantidad de terreno y agua. Por ejemplo, en la producción de cereales, para obtener 1 caloría se necesitan 0,51 litros de agua; en comparación con los 1,34 litros por caloría de verduras, 2,09 litros por caloría de fruta y 10,19 litros por caloría de carne roja.
De hecho, un nuevo estudio publicado en la revista Science pone de manifiesto que "el impacto de los productos de origen animal que menor huella producen suele ser superior al de sus sustitutos de origen vegetal". Esto hace que la incorporación en la dieta de más alimentos de origen vegetal, como la pasta, adquiera aún más relevancia.
El cambio a una alimentación basada principalmente en alimentos de origen vegetal, como la pasta, es un método infalible para llevar una dieta más sostenible. Tanto si se quiere adoptar una dieta basada únicamente en alimentos vegetales, como si solo se quiere reducir la ingesta de carne, la pasta es igualmente adecuada porque admite cualquier tipo de acompañamiento y es un alimento muy saciante en sí.
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La pasta es un alimento simple de origen vegetal, con bajo impacto medioambiental
Este fue el punto que añadieron los expertos reunidos en el Consenso Científico de 2015 sobre La Pasta: se trata de un alimento saludable desde la mirada de expertos en nutrición que añadieron dicha premisa punto a la Declaración del Consenso Científico.
Desde entonces, algunos de los mejores científicos de Rusia, Turquía y Brasil también se han sumado a la celebración de los eventos posteriores del Día Mundial de la Pasta en Moscú (2016) y São Paulo (2017).
Según el Dr. David Katz, director fundador del Centro de la Investigación Preventiva de la Universidad de Yale, y fundador de la True Health Initiative, el papel que desempeña la pasta en las dietas saludables ofrece una base perfecta para unas opciones de alimentación nutritivas y sostenibles:
- Incluir a la pasta como base de la alimentación, aporta a la reducción de la huella ecológica en la tierra.
- Contrario a lo que piensa la mayoría de gente, la preparación de pasta en los hogares es la parte del ciclo con mayor influencia sobre el medio ambiente, representando hasta un 38% de la huella de carbono de la pasta a lo largo de toda su cadena de producción.
Panorama reciente de la producción y el consumo de pasta en el mundo
Según informa la International Pasta Organisation, en 2022 se produjeron 16.9 millones de toneladas de pasta en el mundo. Los principales productores a nivel global son:
- Unión Europea: 32.8%
- Resto de Europa: 17.9%
- Centroamérica y Sudamérica: 17.7%
- África: 13.8%
- Norteamérica: 12.9%
- Medio Oriente: 3.5%
- Asia: 1.4%
- Australia: 0.3%
Respecto a los principales países consumidores de pasta, la misma fuente reporta los siguientes consumos per cápita:
- Italia: 23.2 Kg
- Túnez: 17 Kg
- Venezuela: 13.6 Kg
- Grecia: 12.2 Kg
- Perú: 9.9 Kg
Más de una razón para amar la pasta
Según señala la International Pasta Organisation, entre los principales motivos por los que la pasta es considerada un alimento delicioso y saludable, se encuentran estas razones:
- Es buena para la salud de las personas y para el planeta
- Es un elemento clave en la Dieta Mediterránea
- Aporta energía y saciado de tiempo prolongado
- No engorda
- Es sabrosa y une a la gente
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