Reportan que la industria refresquera va al alza

De acuerdo con un análisis sobre el desempeño de la industria realizado por KPMG, en los últimos 16 años, la industria refresquera ha experimentado una tasa de crecimiento compuesta anual de 1.2%.
La actividad económica de la industria refresquera equivale a alrededor del 1.2% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Esta ha enfrentado diversos retos en el mercado; uno de los más recientes fue en 2014, cuando las medidas recaudatorias aplicadas (IEPS, Impuesto Especial sobre Producción y Servicios) ocasionaron un incremento en los precios de bebidas saborizadas. Sin embargo, los patrones de consumo se mantuvieron entre los mexicanos, y la industria mantuvo su crecimiento en 2015 y 2016, según el análisis presentado por KPMG en México, firma multidisciplinaria que brinda servicios de Auditoría, Impuestos y Asesoría, con información de los asociados de la ANPRAC (Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas).

El estudio señala que la industria cerró el 2016 con un volumen de ventas de alrededor de 18,824 millones de litros de refresco, lo cual representa un incremento de 3.8% con respecto del año anterior. La tasa de crecimiento compuesta anual de 2014 a 2016 en dicho indicador fue de 4%, lo cual representa un mayor nivel al observado de 2000 a la fecha (1.2%).

“La producción de refrescos en México fue favorable en 2015 y 2016, reflejado en el alza en el volumen de ventas. Esto se debe, en gran medida, a cómo se ha logrado adaptar la industria a los patrones del consumidor mexicano, aun con las medidas fiscales aplicadas”, sostuvo Oscar Silva, Socio Líder del Global Strategy Group de KPMG en México.

“Hoy el consumidor mexicano busca presentaciones de mayor volumen y envases retornables para compensar los incrementos en el precio por el IEPS, como resultado el volumen de ventas en presentaciones grandes y extra grandes tuvo un incremento de 2014 a 2016, esto debido a que el consumidor ahorraba en el costo por mililitro; en cuanto a su consumo per cápita, esta se ha mantenido moderada de 2012 a 2016 en un .3% anual”, refirió Lorenzo Gómez Morín, Gerente del Global Strategy Group de KPMG en México.

En ese sentido, la industria refresquera ha sido suficientemente creativa y capaz de adaptarse a los patrones de consumo del mexicano; se ha diversificado hacia bebidas no carbonatadas y 2017 no será la excepción, pues seguirá con desarrollos en:
-    Bebidas no carbonatadas
-    Bebidas deportivas / Energizantes / Saludables
-    Optimización de canales de distribución

De ahí que la firma aseguró que es un buen momento para que las refresqueras sigan diversificando sus productos, al desarrollar nuevos nichos que les permita tener ingresos adicionales y no trasladar al consumidor el impacto del aumento de precios en sus insumos.

Por otro lado, “la industria refresquera ha tenido un rol muy importante en la inversión de activos en México, pero también en iniciativas de responsabilidad social y en tecnologías para hacer un uso más eficiente del consumo de agua”, señaló Lorenzo Gómez.

Con respecto del consumo de agua para el proceso de manufactura, la industria ha invertido en nuevas tecnologías y equipo de producción, permitiendo reducir un aproximado de 2% anual, de 2012 a 2016, el consumo de litros de agua por cada litro de producto.

“Las cifras compartidas muestran un comportamiento positivo de la industria, guiado principalmente por nuevos patrones de consumo en los mexicanos y al crecimiento demográfico. Vemos una industria fuerte y en crecimiento que, pese a los cambios macroeconómicos y las nuevas regulaciones, seguirá aportando su granito de arena en el crecimiento de la economía de México“, concluyó Oscar Silva.

El análisis realizado (de 2015 hasta el tercer semestre del 2016) contempla diversos ejes fundamentales que son clave en el sector para determinar el desempeño futuro de la industria como el volumen de ventas, la generación de empleos, la inversión de activos, la participación en estrategias de responsabilidad social y ambiental, entre otros.

Fuente: KPMG en México