Recientemente se inauguró en Wittenburg, la ampliación del FlourWorld Museum. Bajo el lema Harina.Poder.Vida. Las nuevas salas temáticas explican, entre otras cosas, la prehistoria del cultivo del trigo.
Dos hallazgos casuales permitieron organizar una de las exposiciones histórico-culturales actuales más amplias sobre la importancia de la harina para la humanidad. El recorrido por la ampliación del museo se abre con una reproducción figurativa viviente de Ötzi, que vivió hace 5,300 años. Este personaje representa a las primeras personas que se conoce que comían productos de cereales. La de Ötzi en Wittenburg es la única reproducción original en Alemania del sensacional hallazgo prehistórico realizado en los Alpes de Ötztal, cuya presentación fue posible gracias a una estrecha cooperación con el Museo de Arqueología del Sur del Tirol situado en Bozen.
El punto de partida del museo fue el hallazgo de un saco de harina en la playa de Dubái el año 1998 por parte Volkmar Wywiol. El socio de la empresa Mühlenchemie comenzó así una colección inusual de sacos de harina. Los logotipos de las fábricas de harina hablaban de tradición, explicaban las historias y mitos de la harina. Actualmente, esta colección única en todo el mundo tiene más de 3,400 piezas expuestas, procedentes de 137 países, que constituyen el núcleo del Flour World Museum de Wittenburg, dedicado a la historia de la cultura del alimento básico más importante de la humanidad.
Consideramos nuestra colección como el Salón de la Fama para todas las fábricas de harinas, que suministran harina diariamente a las personas de todo el mundo. Con la apertura de las nuevas salas se logra un nuevo hito para establecer un Foro de conocimientos de los cereales, que debe familiarizar también a los consumidores con la historia y la importancia del grano para nuestro pan diario, afirmó Volkmar Wywiol durante la festiva inauguración de la ampliación del museo en Wittenburg.
El título Harina.Poder.Vida. indica la gran importancia que tuvo la modesta y cotidiana harina para la historia de la humanidad, ya que no solo permite la vida de las personas, sino que es también la base de cualquier estructura de estado que supere la magnitud de una sociedad tribal. La harina no es solo un sinónimo de vida, sino también de poder.
A la entrada de la planta, da la bienvenida a los visitantes un símbolo impresionante de la prehistoria del cultivo de los cereales, el hombre del hielo, inaugurando la exposición multimedia. El cuerpo de la momia de los glaciares hallada en los Alpes de Ötztal se ha conservado perfectamente y nos transporta inmediatamente a 5.300 años atrás, la era de los inicios de la agricultura en Europa. En los restos del abrigo de piel de Ötzi se encontraron dos granos de espelta cultivada. La espelta es el tipo de cereal cultivado más antiguo. Esta reproducción de la figura de Ötzi es la única en toda Alemania.
Actualmente se han finalizado las dos primeras salas de la planta superior. Está previsto el recorrido por la historia de la cultura de la harina a través de los temas de los cereales y la harina en las creencias de los pueblos, la industrialización de la agricultura y la molinería, el futuro de la harina, los componentes de la harina, la mejora de la harina, las enzimas y los productos de harina de todo el mundo.