Con un consumo de 200 millones de toneladas anuales, el plástico es la tercera aplicación del petróleo más usada en el mundo y uno de los contaminantes más letales para el planeta. Como alternativa, cada vez más países están impulsando el uso de bioplásticos.
Los bioplásticos son polímeros naturales provenientes de residuos agrícolas, celulosa o almidón de patata o maíz. Son 100% biodegradables e igual de resistentes que los plásticos tradicionales. En un contexto global cada vez más preocupado por el medio ambiente, se prevé que la industria de esta alternativa ecológica crezca más de 15% en el futuro cercano.
De acuerdo con datos de mercado de European Plastics, que fueron presentados en la 14ava Conferencia Europea de Bioplásticos en Berlín, la industria global de bioplásticos mantiene un importante crecimiento dinámico.
“En un ambiente cada vez más consciente del medio ambiente, se prevé que el mercado global de bioplásticos crecerá a más de 15% en los próximos cinco años”, expresó Hasso von Pogrell, Director General de European Bioplastics.
“Esta tendencia es posible gracias a la creciente demanda de productos sostenibles por parte de los consumidores y las marcas por igual y los continuos esfuerzos de la industria de bioplásticos para desarrollar materiales innovadores con propiedades mejoradas y nuevas funcionalidades”.
Producción de bioplásticos a la alza
Se espera que a nivel global la capacidad de producción de bioplásticos aumente de alrededor de 2.1 millones de toneladas en 2019 a 2.4 millones en 2024.
Los biopolímeros innovadores como PP (polipropileno) y PHAs (polihidroxialcanoatos) están impulsando este crecimiento. Los PHA son una importante familia de polímeros que entraron al mercado a una escala comercial más grande, la cual continúa aumentando. Las capacidades de producción se establecen en más del triple en los próximos cinco años.
Estos polímeros tienen una base biológica, son biodegradables y presentan una amplia gama de propiedades físicas y mecánicas. Las capacidades de producción de PP serán casi sextuplicadas para 2024.
Los plásticos biodegradables y no biodegradables, incluidas las soluciones integradas de PE (polietileno) y PET (tereftalato de polietileno) de base biológica, así como los PA (poliamidas) de base biológica, actualmente representan alrededor del 44% (casi 1 millón de toneladas) de las capacidades mundiales de producción de bioplásticos.
Se prevé que la producción de PE de base biológica continúe creciendo a medida que se planeen nuevas capacidades en Europa en los próximos años. Sin embargo, las intenciones de aumentar las capacidades de producción de PET con base biológica no se han realizado casi al ritmo previsto en años anteriores, pero en realidad disminuyeron con los años.
En cambio, el enfoque se ha desplazado hacia el desarrollo de PEF (furanoato de polietileno), un nuevo polímero que se espera que ingrese al mercado en 2023.
El PEF es comparable al PET, pero tiene una base biológica completa y además posee características superiores de barrera y propiedades térmicas, haciéndolo un material ideal para botellas de bebidas.
“Una vez más los datos muestran que no hay competencia entre la materia prima renovable para alimentos y piensos, y el uso de bioplásticos”, explicó Francois de Bie, presidente de European Plastics, “94% de toda la tierra cultivable se usa para pastura, pienso y alimentos”.