Innovan en tecnología para obtener extractos y productos naturales

AINIA mejora la eficiencia de sus instalaciones de extracción supercrítica con el objetivo de hacer accesible esta tecnología a un número mayor de empresas innovadoras. De esta manera se consigue reducir los costes de procesos de desgrasado con CO2 hasta un 40%.
Los sectores de frutos secos, cereales y salvados, aromas y fragancias, extractos vegetales y aditivos, cacao y aceites esenciales vienen demandando soluciones tecnológicas que permitan la generación de valor de los extractos naturales obtenidos de sus materias primas.

Estos sectores, que tienen una importancia destacada en algunas zonas de la Comunidad Valenciana, ven una oportunidad en la demanda creciente de extractos naturales y productos “bio” por parte del consumidor.

Por ejemplo, la obtención de aceites a partir de frutos secos o de los aceites esenciales de plantas aromáticas; o la obtención de productos con bajo nivel de grasa como alimentos con alto nivel en proteínas vegetales o cacao desgrasado, a la vez que se preservan las características de los extractos que se recuperan (por ejemplo, manteca del cacao); requieren de tecnologías nuevas que, por una parte, no sean contaminantes en sus procesos de extracción y, por otra, permitan obtener un nivel muy elevado de calidad del extracto porque en ello va parte del valor añadido del nuevo “bioproducto”.

La tecnología basada en CO2 supercrítico (sustancia que en determinadas condiciones se encuentra en un estado con propiedades intermedias entre líquido y gas) puede emplearse en multitud de operaciones básicas y dadas sus características está experimentando un notable desarrollo en su aplicación industrial.

Precisamente para mejorar los costes y el nivel de pureza del producto final obtenido mediante esta tecnología avanzada de extracción, AINIA ha venido trabajando durante este año en el proyecto OCPES, cuyo objetivo último es optimizar los procesos de extracción supercrítica considerando su configuración más conveniente, de cara a poder ofrecer las máximas posibilidades de escalado industrial a empresas innovadoras y emprendedores, especialmente de la Comunidad Valenciana, que apuesten por lograr un valor añadido diferencial en el mercado.

Según Elvira Casas, técnico de AINIA responsable del proyecto, “mejorando la eficiencia del proceso de extracción estudiando la configuración más adecuada con diferentes tipologías de producto (cacao, cereales y plantas aromáticas) hasta el momento hemos conseguido reducir costes de escalado en los casos estudiados hasta en un 40 por ciento, lo que es un importante avance que podría incluso superarse según progresen las investigaciones”. El proyecto OCPES puede facilitar que las empresas puedan acceder a la tecnología a unos costes competitivos en el entorno cercano, sin necesidad de deslocalizar su proceso extractivo en otras zonas del mundo.

“Nuestra intención es que cada vez sea económicamente más accesible aplicar el tratamiento de extracción supercrítica a un número creciente de materias primas. De esta forma, favorecemos que pueda superarse la fase de escala de laboratorio y llegar a aplicarse eficientemente a escala industrial”, incide Elvira Casas.

El proyecto OCPES se enmarca en la línea de I+D propia de AINIA en fluidos supercríticos, en la que el centro tecnológico lleva trabajando más de dos décadas y es una referencia internacional. Este proyecto está cofinanciado por IVACE y Fondos Feder, dentro del programa de ayudas a la I+D propia de institutos tecnológicos de la Comunidad Valenciana.

AINIA cuenta con cinco patentes en soluciones tecnológicas aplicables a procesos de extracción en FSC, así como otra patente relacionada con la desinfección de productos alimentarios. Además de una planta piloto, también cuenta con una planta industrial de extracción supercrítica única en Europa multiproceso y multiproducto, en la que es posible efectuar procesos bajo GMPs y certificación “BIO”.

Fuente: AINIA Centro Tecnológico