Mientras la comida light gana adeptos alrededor del mundo, una cadena de comida rápida en EE.UU. apunta en la dirección contraria.Se trata de la parrilla El infarto (Heart Attack Grill) cuyo menú incluye una hamburguesa de 8.000 calorías. Sus ingredientes: cuatro hamburguesas fritas en grasa de cerdo, panceta, ocho fetas de queso, un tomate entero, media cebolla y seis rebanadas de pan.
La ambientación de sus restaurantes asemeja a un hospital: las mozas se visten como enfermeras, los clientes son tratados como pacientes y los pedidos simulan ser recetas médicas.
Como parte del peculiar decorado, una ambulancia espera en la puerta, donde un enorme cartel advierte: Este restaurante puede perjudicar seriamente su salud.
Su hamburguesa más famosa también lleva un nombre quirúrgico: la Cuádruple Bypass. El resto del menú se completa con hamburguesas XXL, gaseosas con azúcar agregada y una especie de barra de ensaladas repleta de papas fritas.
Para completar este atentado a las arterias, la cadena comercializa también cigarrillos sin filtro.
Pornógrafo nutricional
¿Cuál es el objetivo de esta compañía gastronómica?: Ofrecer una comida por la que valga la pena morir.
Así lo define el polémico Jon Basso, más conocido como Doctor Jon, graduado en marketing y fundador de la cadena.
Heart Attack Grill fue lanzada en 2005 en Chandler, Arizona y acaba de abrir su tercera sucursal en Las Vegas. Fue en la última inauguración cuando recibió las críticas de la Asociación Americana del Corazón (CHD), que ya había tratado de cerrar la cadena y califica a su dueño como un pornógrafo nutricional.
En 2006 hubo un reclamo más curioso: el Comité Estatal de Enfermeras de Arizona acusó a Basso por usar la palabra enfermera para describir a las mozas.
Basso se defendió: Colocamos grandes señales de peligro en la entrada en las que se puede leer que comer aquí es malo para la salud, algo que no ha hecho ninguna otra cadena de comida rápida.
FUENTE: iprofesional.com