Dentro del sector de empaque alimenticio se identifican tendencias que son consecuencia de nuevos hábitos por parte del consumidor.
Los principales países de crecimiento en términos reales del PIB 2010 son: Singapur (14.7%), China (10.3%), India (9.7%), Taiwan (9.3%), Argentina (8.5%), Turquía (7.8%), Tailandia (7.5%), Brasil (7.5%), Filipinas (7.0%), y Malasia (6.7%). Lo que demuestra que siete de cada diez provienen de la región Asia-Pacífico, y que a nivel Latinoamérica, Argentina y Brasil son las naciones que gozan de mejor desarrollo económico; sobre todo por exportaciones argentinas de bienes manufacturados demandados por los brasileños.
Un segmento de empaque
El sector de alimentos y bebidas reporta que en 2010, las unidades vendidas representan 2.7 trillones de envases, de los cuales un trillón representa bebidas y 1.7 corresponde a alimentos envasados procesados. A su vez, 30% de estos empaques utilizó plástico flexible, debido al uso generalizado de alimentos congelados y secos, mientras que 31% estuvieron hechos de polietilén tereflalato (PET) para su manejo en agua embotellada y refrescos.
Influencias globales para el empaque alimenticio
La respuesta para implementar mejoras económicas en el sector de envase y embalaje identifica directrices como productos que oferten valor. Propuestas Premium, un ejemplo es la leche Parmalat Omega 3+ comercializada en Italia, país donde los envases tipo glabe top envase de cartón con recubrimiento plástico lideran sobre los de vidrio, PET, polietileno de alta densidad (HDPE), y los shaped liquid cartons.
Otra de las preferencias de consumo está sobre los productos que ofrecen bienestar, como el control de porciones, por ejemplo fracciones más pequeñas de refresco, como la lata lanzada por Coca-Cola en Estados Unidos en 2010, donde redujo de 350 a 222ml su contenido.
Los estilos de vida están cambiando, y este es un hecho al que responden también los nuevos desarrollos, en esta tendencia se puede mencionar la venta en retail de bag-in-box, ejemplificada por el producto 4 Kose que contiene tres litros de vino en Turquía, y Jean Jean en Polonia, también con la misma cantidad de esta bebida.
Una vertiente más son los envases hechos con bioplásticos, de ahí la relevancia de hacer PLA (ácido poliláctico), el cual se puede realizar con la bacteria fermentada de maíz procesado en dextrosa, como lo hace Estados Unidos, aunque en otras regiones se obtiene también a partir de soya, caña de azúcar, y almidón de papas. Los plásticos elaborados con PLA utilizan 65% menos energía en comparación con los creados con petróleo.
Es así que, en cuanto a sustentabilidad, la tendencia del empaque apunta a acortar su ciclo de vida (biodegradable, biopolimeros y reciclable). Lo que redunda no sólo en beneficios ecológicos sino en menores costos.
Además, los empaques se vuelven inteligentes, se convierten en empaques activos y funcionales que pueden absorber oxígeno y humedad (eliminar conservadores y aditivos) ofertando una etiqueta limpia. Además de los empaques con chip, detectan bacterias, avisan con cambios de temperatura, y dan instrucciones, o son reusables.
Consumo latinoamericano
El packaging de alimentos en América Latina representa la cantidad de 203.6 billones de unidades, que dividido por tipo de materiales corresponde a: 62.6% plástico flexible; 16.4% plástico rígido; 7.4% contendores en base de papel; 14.6% liquid cartons; 5.2% metal; 1.1% vidrio; y 0.1% otros.
Los tipos de empaque que tendrán un mayor crecimiento en Argentina durante el periodo entre 2010 y 2015, y que abarcarán el 73% del total de la industria, son los de plástico flexible, cajas plegables, y los de hoja de aluminio. En 2010, el mercado de empaque para alimentos y bebidas fue valuado en 40.7 millones de pesos argentinos, y su tasa de crecimiento anual es de 4%.
Los tipos de empaque que tendrán un mayor crecimiento en Brasil durante el periodo entre 2010 y 2015, y que abarcarán el 68% del total de la industria, son los de plástico flexible, los contenedores de plástico de pared delgada, y los liquid cartons. En 2010, el mercado de empaque para alimentos y bebidas fue valuado en 175 mil 911 millones de reales brasileños, y su tasa de crecimiento anual es de 3.4%.
Los tipos de empaque que tendrán un mayor crecimiento en México durante el periodo entre 2010 y 2015, y que abarcarán el 62% del total de la industria, son los de plástico flexible, los de HDPE, y de cartón y papel. En 2010, el mercado de empaque para alimentos y bebidas fue valuado en 730 mil 791 millones de pesos mexicanos, y su tasa de crecimiento anual es de 2.3%.