Confirman que sustitutos de azúcar otorgan a la industria la capacidad de ofrecer a los consumidores el sabor dulce con menos calorías, reduciendo el aporte energético.Para la elaboración del trabajo por la AHA y la ADA, que ha sido publicado en la revista científica Circulation, se tuvieron en cuenta aquellos edulcorantes bajos o sin calorías aprobados por la Food and Drug Administration (FDA, por sus siglas en inglés): acesulfamo-K, aspartamo, neotamo, sacarina y sucralosa, todos ellos aprobados también para su uso en Europa.
Estos edulcorantes, utilizados como sustitutivos del azúcar en alimentos y bebidas de consumo habitual, otorgan a la industria la capacidad de ofrecer a los consumidores el sabor dulce con menos calorías, reduciendo considerablemente el aporte energético de alimentos y bebidas.
En este sentido, el principal responsable de la declaración y profesor de medicina de la Universidad de Stanford en California, Cristopher Gardner, ha asegurado que establecer las ventajas potenciales de los edulcorantes bajos o sin calorías es complejo, ya que depende de si los alimentos y bebidas que los contienen encajan en el contexto de la ingesta total de alimentos y bebidas de la persona durante el día.
Por ejemplo, si se elige una bebida edulcorada con edulcorantes bajos o sin calorías en lugar de un refresco de 150 calorías, pero posteriormente tomamos un trozo de pastel o galletas por valor de 300 calorías, los edulcorantes bajos o sin calorías no podrán ayudar a controlar el peso, ya que se estarán añadiendo más calorías de las que se han restado, para terminar recordando que los efectos potenciales de estos edulcorantes bajos o sin calorías deben considerarse en el contexto de la dieta global y en el marco de una vida activa en la que se realice ejercicio físico de manera habitual.
Fuente: Europa Press