El invento fue creado por ingenieros del Instituto de Tecnología de Massachusetts.
Ingenieros del Instituto de Tecnología de Massachusetts desarrollaron una capa antiadherente para botellas.
Se trata de la aplicación de una capa delgada de la sustancia sin sabor conocida como Liquiglide - en el interior de la botella, que crea una superficie resbaladiza permitiendo que el contenido se deslice hacia afuera.
El lubricante, no tóxico, se puede utilizar tanto en botellas de plástico y vidrio de productos como salsa de tomate, mostaza y la mayonesa.
Según los inventores, cada año aproximadamente un millón de toneladas de condimentos se tiran todo el mundo debido a los sobrantes que no pueden ser raspados de los frascos y botellas, con un máximo de 15% de producto que queda en el envase.
Fuente: Agencias