La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) anunciaron una nueva campaña mundial para reducir el desperdicio de alimentos.En un comunicado, la FAO señaló que medidas sencillas por consumidores y vendedores minoristas de alimentos pueden reducir drásticamente los mil 300 millones de toneladas de alimentos que cada año se pierden o desperdician, y ayudar así a crear un futuro sostenible.
Explicó que la campaña "Piensa, aliméntate, ahorra: reduce tu huella alimentaria", surgió en apoyo de la iniciativa Ahorrar Alimentos. El proyecto, que busca reducir la pérdida y desperdicio de alimentos a lo largo de toda la cadena de producción y consumo, es promovido por la FAO y los organizadores de la feria comercial Messe Düsseldorf, y se suma a la iniciativa Hambre Cero, del secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
La nueva campaña se dirige específicamente a los alimentos desperdiciados por los consumidores, los minoristas y la industria hotelera, especificó. Indicó que la campaña aprovecha la experiencia de organizaciones como el Programa de Acción para el Desperdicio y los Recursos, Feeding the 5,000 y otros socios, incluidos gobiernos, que tienen vasta experiencia en identificar y modificar las prácticas derrochadoras. Señaló que la campaña "Piensa, aliméntate, ahorra", tiene como objetivo acelerar las medidas y proporcionar una visión global y un portal de intercambio de información (www.thinkeatsave.org) para las múltiples y diversas iniciativas en curso en el mundo.
A escala mundial, alrededor de un tercio de todos los alimentos que se producen por valor de cerca de un billón de dólares se pierde o se desperdicia en los sistemas de producción y consumo alimentarios, según los datos publicados por la FAO. La pérdida de alimentos se produce sobre todo en las etapas de producción recolección, procesamiento y distribución, mientras que el desperdicio ocurre por lo general a nivel del minorista y el consumidor, al final de la cadena de suministro de alimentos.
En un mundo de 7 mil millones de habitantes, que aumentarán a 9 mil millones en 2050, el desperdicio de alimentos no tiene sentido ni a nivel económico ni ambiental ni ético, aseguró el secretario general adjunto de la ONU y director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner.
En las regiones industrializadas, casi la mitad del total de alimentos desperdiciados, alrededor de 300 millones de toneladas al año, se debe a que productores, minoristas y consumidores desechan alimentos que aún son aptos para el consumo, señaló el director general de la FAO, José Graziano da Silva.
Fuente: La Jornada