Plastivida Argentina, entidad que controla la calidad de los productos fabricados por la industria del plástico, argumenta que el verdadero problema que genera la contaminación con bolsas plásticas es la falta de educación en la población y la carencia de políticas adecuadas para el correcto tratamiento de los residuos.
Raúl Segretín, Titular de la sede local de Plastivida explicó que a diferencia de lo que se cree, los residuos plásticos "no contaminan la tierra ni el agua porque no se biodegradan ni se disuelven en líquidos y por lo tanto no generan contaminación".
Lo que sí producen -aseguró- es un impacto visual. "El problema no pasa sólo por la bolsa, sino que depende mucho del nivel de concientización en la población y de las políticas públicas que se apliquen en relación al tratamiento de los deshechos", opinó el representante en el país de la organización que trabaja en el tema de plásticos y medio ambiente desde hace 17 años.
En lugar de apostar por la biodegradación, esta entidad apunta a fomentar una legislación que permita reciclar los envases fabricados con polímeros. Según Segretín, el costo de un material degradable en forma natural es seis veces mayor al que se usa con distintas aplicaciones en la industria actual.
"No es muy posible reemplazar un material por otro. Las sustancias biodegradables no se fabrican en Argentina. Por eso, lo óptimo sería aprovechar la provisión que ya existe y transformarla a través del reciclado", dijo y agregó que una herramienta clave en este aspecto sería contar con una ley nacional que fije el tratamiento de los residuos de envases y embalajes.
De acuerdo a los registros de Plastivida, en la actualidad existen 42 firmas en todo el país dedicadas al reciclaje de plásticos.
Fuente: losandes.com.ar