Bebidas isotónicas en el deporte

Las personas satisfacen su necesidad diaria de líquido a través del hábito y consumo normal de bebidas en las comidas. Sin embargo, en la actividad física, las llamadas isotónicas ofrecen la composición para mantener el equilibrio de los fluidos, ya que sustituyen los electrolitos que se pierden con la transpiración.

La hidratación es imprescindible en la vida de los seres humanos. Es fundamental para mantener la temperatura normal del cuerpo y para cada una de las acciones fisiológicas del organismo, pero pocos tenemos conciencia de cómo hidratarnos correctamente, pues existen bebidas creadas para diferentes necesidades y estilos de vida. Tal es el caso de los deportistas, quienes requieren hacerlo de una manera adecuada para disfrutar de la actividad física por más tiempo.

Después de una amplia revisión de diversos estudios, la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos concluyó que todas las bebidas y alimentos pueden ayudar a mantener hidratado el organismo. Este análisis determinó que la mayoría de las personas pueden satisfacer sus necesidades diarias de líquido a través del hábito y consumo normal de bebidas en las comidas, refrigerios y en otros momentos. Las personas que realizan actividad física intensa o que viven en climas cálidos, necesitan consumir aún más bebidas.

Existen hidratantes que pueden ser una opción para la gente que practica algún deporte, pues debe reponer la energía utilizada para restituir las sales y los minerales perdidos durante el desgaste físico.

Las bebidas deportivas, también llamadas isotónicas, tienen una composición especial para reponer fácilmente el agua, las sales minerales y otras sustancias perdidas durante la activación física. Tomadas antes y durante el ejercicio pueden retrasar la fatiga y mejorar el rendimiento, ya que sustituyen a los electrolitos que se pierden con la transpiración.

Para los atletas, la ingesta regular y abundante de agua no es suficiente, debido a que una sudoración abundante produce un déficit de agua y también de sodio. Por lo tanto, una adecuada dosis de agua, sodio e hidratos de carbono, como los contenidos en las bebidas deportivas, deben formar parte de cualquier plan de hidratación.

Durante el ejercicio físico, el cuerpo intenta mantener la temperatura normal a través de la sudoración, por lo que se pueden perder grandes cantidades de agua y sales minerales. La hidratación es de suma importancia para mantener el óptimo rendimiento del atleta. Ya ha sido demostrado por numerosos investigadores que la falta de reposición de líquidos durante la actividad puede conducir rápidamente a la reducción del rendimiento y a un incremento del riesgo de sufrir complicaciones por calor.

Bebidas deportivas

Las bebidas deportivas son líquidos formulados especialmente para poder disfrutar de la actividad física o del deporte de manera más prolongada. Contienen las cantidades adecuadas para ayudar a la hidratación correcta del organismo, para evitar los síntomas de deshidratación.

Existen distintos tipos, muchas de ellas tienen contenido multivitamínico que ejerce la labor de rehidratación y restitución de sales y minerales. Sus ingredientes aportan las cantidades recomendadas de energía a fin de mantener un desempeño óptimo durante las actividades físicas prolongadas y ayudan a mantener el equilibrio de los fluidos, ya que sustituyen los electrolitos que se pierden con la transpiración.

Los electrolitos, como el potasio, el sodio y el cloruro, son compuestos importantes para mantener la proporción de los líquidos en el cuerpo. Dado que los estos se pierden con la transpiración, la forma de reponerlos es ingiriendo diferentes tipos de bebidas, como las deportivas o los jugos. Además, se pueden reponer con alimentos, como frutas y verduras.

Algunos de los beneficios de las bebidas isotónicas son:

• Aportan al cuerpo la energía recomendable en una bebida deportiva, para mantener un desempeño óptimo cuando se realiza ejercicio.
• Contiene las cantidades adecuadas de electrolitos que ayudan a recuperar correctamente los líquidos que se pierden con la transpiración, sobre todo en caso de mucho calor y sudoración.
• Los electrolitos, como el sodio y el cloro, incrementan la ingestión voluntaria de líquidos, lo que ayuda a evitar los síntomas de la deshidratación.
• Aportan vitaminas del complejo B, indispensables para transformar correctamente los alimentos en energía, favoreciendo al óptimo desempeño físico diario.
• Ofrecen una gran variedad de sabores agradables y atractivos colores para poder elegir el que más agrade.