Recientemente se modificó la normatividad para convertirla en una herramienta dinámica que mantuviera el paso frente a los cambios del mercado.En el Día Mundial de la Alimentación, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) de la Secretaría de Salud informó que:
Los consumidores dependen de la información disponible respecto de las características de los productos y servicios que consumen para realizar compras informadas. Si las señales provenientes del mercado son confusas o asimétricas es difícil pensar que las compras realizadas por los consumidores serán racionales y, muchos menos, óptimas. En este sentido, la información contenida en el etiquetado de los productos juega un papel fundamental como herramienta de decisión.
En ese sentido, el Ejecutivo Federal recientemente modificó la normatividad en su conjunto para convertirla en una herramienta dinámica que mantuviera el paso con el mercado, que fuera de modificación sencilla para ser capaz de regular rápidamente los contenidos nutricionales de los alimentos, que incorporara los avances internacionales en la materia de etiquetado de alimentos y que estuviera a la par de las mejores y más efectivas regulaciones capaces de proteger cabalmente la salud de la población.
La nueva normatividad establece de forma simple y clara la información comercial y sanitaria, además determina las características de dicha información. Su utilidad radica en proporcionar las bases para que el etiquetado sea una herramienta de comunicación a través de la cual el consumidor obtenga información verídica sobre las características, contenido, composición y propiedades de los productos.
Adicionalmente, representa el instrumento que apoya al consumidor en la selección del producto final comercializado en el territorio nacional. De esta manera, la autoridad sanitaria ha sido capaz de influir y encaminar las decisiones de los consumidores hacia productos alimenticios cuyo contenido nutrimental y sanitario sea conducente para la preservación de la salud pública.
Las recientes reformas en materia de etiquetado han estado encaminadas también, a la armonización con la regulación internacional. Se ha empatado con la Norma General del Codex Alimentarius para el etiquetado de los alimentos pre-envasados, Codex Stan 1-1985 (Rev. 1-1991), y busca que los parámetros atiendan a las mejores prácticas de protección sanitaria.
Fuente: www.cofepris.gob.mx