De acuerdo con Robert Graves, director de Marketing y Comunicación de Tetra Pak, la tecnología ha tenido un lugar relevante en la evolución de los envases porque de ahí surgió la pasteurización.
"Entonces la empresa tuvo la oportunidad de desarrollar el envasado aséptico, y juntando los dos tuvimos el mismo envase tetraclassic, pero ahora con mayor duración", señaló.
Agregó que el siguiente paso fue intentar ser más eficientes en la distribución y de ahí nace la forma del envase tetrabrick; entonces se trata de la misma tecnología con el mismo principio, pero con un diseño diferente y esto hace que sea más fácil distribuirlo.
El consumidor, clave para la evolución de los envases
"Para el desarrollo de un envase hacemos un research con cada uno de ellos y vemos el envase tetrabrick un poco más alto, en este caso el tetrabrick aséptico, para jugos; luego el consumidor nos pide que tenga sistemas de apertura, que tenga tapa, luego que además de la tapa que sea recerrable y resellable, entonces ya viene con tapa-roscas, y luego vemos que para cada categoría pide que el envase sea un poco diferente. Si voy con vino, no quiero que se use ese mismo diseño de envase que se utiliza par jugos, es diferente, y así hemos desarrollado diferentes categorías, pero todos con la misma tecnología", explicó.
En relación a qué es lo más importante para definir la forma de un envase, el especialista indicó que primero que sea fácil de distribuir con el menor impacto ambiental.
Luego, eficientar la parte de distribución y costos para los clientes y en tercer lugar la parte de diferenciación, esta última con toda la investigación necesaria escuchando al consumidor final.
"Siempre hay que tener en cuenta que lo que te pide un niño no es lo mismo que lo que pide una ama de casa", precisó.
Fuente: El Universal