Las ventajas del vino en lata son evidentes para los consumidores, pues se trata de productos más pequeños y ligeros de transportar, pero también más duraderos. Son tan reciclables como los envases de vidrio y se prestan a diseños más distintivos.
Para el comercio también hay ventajas. Las latas ocupan menos espacio en los almacenes y frigoríficos, son más ligeras de transportar y están disponibles en varios tamaños. Cuando se permite su venta en tiendas de conveniencia, existen más oportunidades de obtener un margen más alto que el que ofrece normalmente una botella de 750 mililitros.
El vino en lata también goza de estas ventajas, pero aún no ha alcanzado una masa crítica. Un problema es que la historia del vino ha estado muy ligada a la botella de cristal.
Según un estudio de Wine Intelligence, los bebedores de más edad simpatizan con la idea de un vino en una bolsa, si el envase es atractivo y la necesidad implica una gran convivencia al aire libre. Sin embargo, para muchos bebedores de más edad, la idea del vino en una lata sigue siendo un impensable.
6 claves a tener en cuenta en el negocio de vino en lata
- No todo el vino responde igual a la lata. Los factores operativos pueden afectar a la calidad del vino en lata, por ello, los productores deberían evaluar qué tipos de vinos probar al pasar a este formato. Esto también podría considerarse desde el punto de vista del consumidor, que suelen optar por bebidas espumosas en lata.
- Aprovechar el crecimiento de la premiumización. Los consumidores compran y consumen cada vez más latas de otras categorías de alcohol. Los niveles de aceptación de los productos premium en latas crecerán, siempre que las señales de premium sean claras.
- Utilizar la oportunidad actual para las bebidas ready-to-drink de vino. Los datos recientes de Wine Intelligence y el IWSR muestran que los consumidores de Estados Undios han experimentado cada vez más con la categoría de bebidas alcohólicas durante 2021.
- Las marcas de vino ya existentes pueden extenderse con éxito al formato de lata. Los consumidores suelen comprar vino en latas en función de la ocasión. Por ello, es probable que las marcas de vino existentes no vean afectados negativamente sus valores de marca actuales al extenderse a este formato.
- Centrarse en la profundidad más que en la amplitud de la distribución. Tener vino en lata en la amplia distribución puede hacer que los agotamientos iniciales parezcan buenos. Pero algunos entornos minoristas tendrán mucha más relevancia para este formato que otros.
- El vino en lata es una forma de entrar en la tendencia de bebidas con menos alcohol. La creación de un producto de vino en lata ofrece a los productores la oportunidad de salirse del clásico nivel de alcohol de 11-13%. Con el formato de la lata actuando como dispositivo diferenciador para evitar comparaciones negativas con el vino estándar.