En el sector de alimentos el concepto de packaging está cada vez más presente y las marcas están apuntando sus estrategias hacia lo verde y práctico. Expertos consideran que el packaging es una parte crucial de la percepción de la marca, pues es el mayor punto de contacto con el consumidor.
Especialistas detallan cuales son las tendencias de packaging por los que se está apostando en el sector alimentario:
Envase verde
El movimiento ecológico mantiene una tendencia de crecimiento al alza. Del mismo modo que el cliente muestra una mayor preocupación por el proceso realizado sobre los alimentos que tomamos, también las marcas deben hacerlo con los envases y el ciclo de vida de los mismos.
Los expertos opinan que estamos acostumbrados a ver en los lineales de los supermercados empaques hechos con materiales reciclables o biodegradables. Las marcas ya se distinguen unas de otras por medios de certificados ecológicos y el público informado de ello, los busca. Esta es una forma de crear una mayor vinculación marca-consumidor.
Empaques con segunda vida
Es una tendencia alineada con el movimiento ecológico, pero no es tan “verde”. Se trata de la reutilización de envases, dándole más de una vida. Muchas marcas diseñan sus empaques de manera que luego se puedan utilizar para reutilizar con el mismo producto.
Ahora la tendencia se dirige hacia la reutilización del empaque con otro fin, de esta manera el consumidor lo puede conservar con fines prácticos o decorativos como lo es guardar objetos personales o incluso usarlo como maceta. Esto hace que se mejora la percepción del consumidor sobre la marca y su Top Of Mind.
Empaque funcional
Otra tendencia son los envases funcionales, tanto desde el punto de vista del consumidor y como el de la marca. Existe una tendencia de personalizar el empaque y las etiquetas de los productos y ello se traduce en una mayor vinculación con el consumidor, además de lograr una mayor interacción. Esta última muy recurrida para generar campañas en redes sociales y el consecuente engagement hacia la propia marca.
Además se busca que sea práctico, de manera que el mismo empaque sirva para transportar el producto sin necesidad de bolsas, o usado como elemento de consumo, sin hacer uso de recipientes como platos o bandejas.
Los especialistas enfatizan que las marcas de alimentación van más allá. Su imagen e interior importa, pero su exterior y presentación no pueden descuidarse.