Los empaques inteligentes son los que monitorizan las condiciones del alimento envasado dando información sobre su calidad durante el transporte y el almacenamiento; entendiendo por condiciones del alimento:
- Procesos fisiológicos (respiración de frutas y verduras frescas)
- Métodos químicos (oxidación de lípidos)
- Procesos físicos (endurecimiento de pan, deshidratación)
- Aspectos microbiológicos (dañado por microorganismos)
- Infección (por insectos)
Este tipo de empaques incorporan dispositivos que son sensibles a los cambios de temperatura, composición gaseosa o modificaciones biológicas, y son capaces de comunicar estos cambios al consumidor.
Los dispositivos de empaque inteligente son capaces de registrar y suministrar información relativa al estado del envase y del producto (integridad, rotura del precinto, calidad, seguridad), y se utilizan en aplicaciones tan diversas como: demostración de la autenticidad de un producto, antirrobo, trazabilidad, etcétera.
Su acción posibilita un sueño en las pretensiones del consumidor del mundo moderno, siendo el envase mismo el que habla de su calidad o de los sucesos que han marcado su procesado, actuando como “chivato” de posible mal estado o degradación, así como de un mantenimiento, transporte o distribución inadecuada.
Envases inteligentes que evitan el desperdicio de alimentos
El dispositivo inteligente DeXel es una creación conjunta de empresas líderes reunidas en Holanda bajo la asociación Packadore Collective, que se adhiere a la parte superior de una tapa metálica para comunicarles a los consumidores de productos alimenticios que deben usarlos antes de que perezcan.
El diseño conceptual de esta innovación utiliza tecnología conectada para convertir los frascos y botellas en empaques inteligentes, contribuyendo de manera decisiva a reducir el desperdicio de alimentos, un problema representado por la pérdida anual de una tercera parte del total de los alimentos que se producen en el mundo.
Con ‘DeXel’, que se adhiere magnéticamente a las tapas de los envases, los creadores esperan contribuir a la reducción de estos sorprendentes índices de desperdicio. Este desarrollo cuenta con la participación de las empresas que forman parte de Packadore Collective: SGK Anthem, Vrijdag Premium Printing, Generous Minds, Neurensics, Kurz y Merck, que participan además con los consumidores, ofreciendo consejos para la preservación de alimentos y la reducción de su desperdicio.
10 empaques innovadores para reducir el desperdicio de alimentos
La estrategia correcta para combatir el desperdicio de alimentos es la aplicación de ideas innovadoras que aseguren la calidad y la seguridad, permitiendo alargar la vida útil de los alimentos que consumimos.
- Materiales combinados con atmósferas de envasado. Garantizan la impermeabilidad de los alimentos utilizando materiales que permiten aumentar la vida útil de los productos, manteniendo la atmósfera en el interior del envase.
- Sistemas para asegurar la integridad del sellado de envases. Con la selección de materiales de difícil perforación que garanticen la integridad del alimento, así como el desarrollo de tecnologías de sellado.
- Envases activos que evitan la entrada de sustancias indeseables al tiempo que liberan sustancias beneficiosas para la conservación del producto.
- Empaques inteligentes que se modifican avisando de que han variado las características organolépticas y microbiológicas del producto
- Desarrollo de envases que permiten mantener en mejores condiciones los productos que no se consumen de una sola vez.
- Empaques más adecuados a los requerimientos y hábitos de los consumidores: porciones más pequeñas, fáciles de usar, extracción 100% del producto.
- Diseño de envases más resistentes que eviten la aparición de defectos por daños mecánicos durante la distribución.
- Empaques con diseño específico para aquellos productos que por sus cualidades necesitan un diseño del envasado específico para su conservación.
- Procesos de envasado sostenibles y envases eco-eficientes. Soluciones de envasado ecoinnovador que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 25 y un 50%.
- Etiquetas inteligentes. Que funcionan una vez abierto el envase, teniendo en cuenta las condiciones de almacenamiento y conservación a los que el alimento es sometido.
Te puede interesar: Envases conectados: Innovación y tecnología en la experiencia de consumo