España.- YOI, que en japonés significa bueno, es la primera biobotella de agua mineral natural fabricada a base de materiales vegetales y está hecha con almidón, cáscara de lino y caña de azúcar. Su desarrollo estuvo a cargo del diseñador Eduardo del Fraile y el empresario Fernando Durán.
La biobotella cuenta con un tapón, envase y etiqueta son 100% biodegradables y compostables. Otra de las ventajas medioambientales que aporta es que su fabricación genera un 60% menos de huella de carbono que las botellas de agua envasada porque precisa de menor gasto de energía y transporte, al fabricarse en la propia planta de embotellado.
Además, el envase se convierte en compost una vez desechado y tiene mayor vida útil que el PET porque YOI sí que puede rellenarse cuantas veces se desee. “Sin duda, un fin de ciclo de vida totalmente recomendable para un envase en relación con el medioambiente”, señala su creador, Eduardo del Fraile.
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La biobotella y la normativa europea
La biobotella posee una declaración de conformidad con la organización CLIFE (Comité de Industrias Francesas de Embalaje) y cumple la Normativa 432 perteneciente a envases compostables, firmado por el comité francés de biodegradabilidad.
La envasadora también pertenece a AIMPLAS (Instituto Tecnológico del Plástico), de Paterna, donde se están gestionando varios certificados en la actualidad.
Cabe destacar que el proceso de creación de la biobotella se realizó a lo largo de cinco años de investigaciones, realizadas en paralelo. Por un lado, se buscó un agua mineral natural de gran calidad que procede de un acuífero de Saldaña (Palencia).
Y, por otro, se realizó una investigación profundamente detallada para crear una botella vegetal, reutilizable y compostable, teniendo como resultado la primer biobotella en el mercado español.
Propiedades del agua
Este producto contiene un agua con altas calidades y muy equilibrada, fina al paladar, con bajo residuo seco, bajo contenido en sodio y PH elevado (PH8). Lo que la convierte en un agua que no hace trabajar excesivamente al riñón y que es apta para el consumo infantil.
Por esa razón, ha sido reconocida con el Diamond Taste Award en los International Taste & Quality Institute de Bruselas.
“El proyecto perfecto consiste en crear una estrategia tan diferencial y acertada en el proceso de diseño que confluya en un resultado visualmente hipnótico y permita al cliente recuperar su inversión con creces”, concluye el diseñador.
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