Una semilla de maíz genera un gran impacto en la vida de los mexicanos, mucho más allá de un taco. A nivel global, la lista de platillos que emplean este ingrediente suma más de 700 preparaciones distintas.
Lo anterior, sin considerar lo que significa el maíz como alimento esencial para otras actividades, como:
- El ganado
- Los cerdos
- Las aves
Además, este grano es un insumo clave para generar energía, así como para desarrollar cerca de 4.000 productos de nuestra vida cotidiana, tan variados como la pintura, el papel, la crema dental y hasta los cosméticos.
La importancia de la semilla de maíz
Según apuntan datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, los principales productores de maíz en México son los estados de:
- Chihuahua
- Jalisco
- México
- Michoacán
- Sinaloa
Sin embargo, en los últimos años se han hecho notables avances en cuanto al maíz que se cultiva en Tlaxcala. Lo anterior, refiriéndose a tipos especiales de semilla de maíz que destacan su color.
Por otro lado, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias reconoce el valor de la semilla de maíz de variedad mejorada. Este tipo de productos son indispensables para el grano y forraje.
Las semillas de variedades mejoradas requieren mayor atención en algunos pasos de su obtención, como:
- Su producción, beneficios y calidad genética
- Las diferencias físicas, fisiológicas y sanitarias e cada una
- La obtención de parámetros que arrojen resultados sobre su capacidad y productividad.
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El papel de la agricultura en el mundo actual
De la misma forma que ocurre con el maíz, la agricultura necesita de ciencia y tecnología para seguir transformando sectores que, por su potencial y desarrollo, enfrentan el reto de garantizar la seguridad alimentaria y una nutrición saludable.
Este reto propicia el desarrollo de soluciones innovadoras y sostenibles para los productores de todo el mundo. Esto va desde la creación de semillas hasta cada producto fitosanitario, siempre buscando nuevas tecnologías y prácticas con profundo respeto por la tierra.
Hoy en día es necesario innovar buscando producir más con menos. Eso significa:
- Proteger los cultivos contra malezas, insectos, enfermedades y presiones climáticas
- Cumplir con los requisitos normativos y de los consumidores
- Apoyar la salud del suelo y aumentar su productividad
Un ejemplo de esto es el banco de germoplasma más grande del mundo; es decir, que cada genoma de semilla conserva sus rasgos de origen aumentando su capacidad productiva derivado de las variables y condiciones cambiantes del ambiente.
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Avances adicionales en el campo
- También se ha avanzado en biodiversidad, que va de la mano con promover la educación; tener herramientas y asesoría para mejorar las poblaciones de microbios benéficos, y apoyar el ciclo de nutrientes y fertilidad del suelo.
- Otra prioridad, desde el punto de visita de la sostenibilidad, está en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero ante el inminente cambio climático. Se está apostando a la inclusión, diversidad y equidad porque se considera que, unir a las personas, servir a las comunidades y promover un diálogo continuo nos llevará a lograr mejores ideas para cambiar y mejorar nuestro mundo.
- Crecer en el camino de la agroindustria también implica hacerlo responsablemente, con profundo respeto por la tierra y la gente que la trabaja. Al final del día son quienes están en el campo y mueven al mundo en muchos sentidos.
Por eso la cosecha no es el fin de la historia, es solo el inicio de una cadena de valor agregado para la alimentación y movimiento del mundo.
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