En un contexto donde la sostenibilidad y la eficiencia operativa son más cruciales que nunca para la industria alimentaria, sobresale la importancia de una gestión de inventarios robusta y moderna para evitar el desperdicio alimentario.

Además de la colaboración entre negocios y consumidores, para enfrentar los desafíos y capitalizar las oportunidades de mayor sostenibilidad para el sector, según la plataforma dedicada al rescate de alimentos.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), cada año se pierde o desperdicia entre el 33% y el 40% de los alimentos a nivel mundial.

Aunque más de la mitad de este desperdicio alimentario ocurre antes de que los productos lleguen al sector retail, esta industria, al estar en el centro de la cadena de valor de los alimentos, está en una posición única para liderar los esfuerzos globales para reducir la pérdida de alimentos.

Un reciente estudio de McKinsey calcula que, trabajando juntamente con todos los participantes en la cadena de valor, la pérdida de alimentos podría reducirse entre un 50% y un 70%.

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Gestión de inventario para reducir el desperdicio alimentario

Actualmente, la gestión de inventario en la industria alimentaria se enfrenta a desafíos significativos, incluyendo:

reducción de desperdicios
mejora de la trazabilidad
adaptación a las demandas del mercado

Sin embargo, este manejo no debe contraponer la rentabilidad del negocio con su accionar sostenible, mismo que puede lograr un impacto significativo en el combate al hambre y la contaminación ambiental.

Los consumidores también desempeñan un papel muy importante en la gestión de inventarios. La merma es inevitable en la industria alimentaria, y tanto negocios como consumidores suelen absorber estos costos.

“Es por ello, que, si mejoramos la planificación del stock y encontramos alternativas efectivas para reducir el desperdicio, los beneficios serán significativos para ambas partes y para los precios en toda la cadena", explica Kim Durand, CEO y fundador de Cheaf.

La nueva Ley General de Alimentación Adecuada y Sostenibilidad en México tiene el potencial de impactar significativamente la gestión de inventarios en la industria alimentaria.

Las empresas deberán ajustarse a las nuevas demandas de productos saludables y sostenibles, cumpliendo con normativas más estrictas y adoptando tecnologías avanzadas para optimizar sus inventarios, fomentar alianzas con productores locales e incluir prácticas sostenibles en almacenamiento y distribución.

“Entre las principales causas identificadas para la merma, se encuentran los pronósticos de demanda inexactos, los estándares estéticos exigentes que descartan alimentos perfectamente comestibles y la gestión ineficiente de inventarios. Esta nueva reglamentación podría ser la puerta para ser más sostenibles y rentables,” concluye Durand.

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