A través del Proyecto T3CE, un grupo de investigadores en España busca métodos “más eficientes” para eliminar los contaminantes en el agua, tales como medicamentos, pesticidas y productos químicos industriales, que actualmente no son regulados ni controlados de manera adecuada.
La investigación tiene como objetivo desarrollar sistemas innovadores que combinen tecnologías de fotocatalizadores y biocatalizadores magnéticos.
Estos sistemas están diseñados para tratar eficazmente las aguas residuales, tanto a pequeña como a gran escala, con el propósito de implementarlos en plantas de tratamiento de aguas.
El proyecto que promueve el tratamiento de agua se anuncia en un momento en que la Unión Europea está actualizando la regulación sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas.
Ello subraya la relevancia de iniciativas como T3CE para promover una economía más ecológica y sostenible.
El Proyecto T3CE es encabezado, y financiado con 382 mil 748 euros, por la Asociación Industrial de Navarra (AIN), así como por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) y ADItech, coordinador de los agentes del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI).
UE avalan reglas para tratamiento de aguas residuales
El pleno del Parlamento Europeo aprobó, en abril pasado, un acuerdo para actualizar los estándares sobre la gestión y tratamiento de las aguas residuales urbanas.
Con esta normativa, para 2035 todas las aguas residuales urbanas deberán ser sometidas a un tratamiento secundario, que implica la eliminación de la materia orgánica biodegradable, antes de su vertido al medio ambiente.
La nueva normativa aplicará a todas las localidades a partir de mil habitantes equivalentes (una unidad de medida estándar que describe la contaminación media emitida por una persona al día).
Para el 2039, el tratamiento terciario, que elimina nitrógeno y fósforo, será obligatorio para todas las plantas de tratamiento de aguas que cubran áreas con al menos 150 mil habitantes equivalentes.
Para 2045, dicha obligación se extenderá a plantas que abarquen desde 10 mil habitantes equivalentes.
Además, un tratamiento cuaternario, para retirar microcontaminantes, será necesario para plantas que atiendan a partir de 150 mil habitantes equivalentes.
“Las autoridades nacionales deberán promocionar la reutilización del agua residual tratada en plantas, en especial en zonas con estrés hídrico”, dijo el parlamento europeo en un comunicado.
Crisis hídrica, una realidad
Especialistas prevén que para el 2050 habrá un déficit del 53 por ciento en el suministro mundial de agua, lo que alerta sobre una inminente crisis hídrica global.
Para Healing Waters, una organización enfocada en el cuidado del agua, a pesar de que el líquido no solo es una necesidad básica sino un derecho humano fundamental, para millones de personas que viven en países en desarrollo y comunidades que sufren pobreza, este recurso esencial sigue siendo un sueño lejano.
Las enfermedades transmitidas por el agua, la degradación ambiental y las disparidades económicas nublan la posibilidad de acceder al vital recurso.
En promedio, las mujeres y niñas de los países en desarrollo caminan 3.7 millas todos los días para recolectar cinco galones de agua y llevarla a sus hogares. Aun así, el agua suele estar contaminada y puede provocar enfermedades.
Con 783 millones de personas en todo el mundo sin acceso al agua, el tratamiento del agua en los países en desarrollo es más vital que nunca, pero no es fácil su realización.
Empresas de alimentos se unen al cuidado del agua
El sector de alimentos, bebidas y agricultura, representa entre el 75% y el 80% del uso de agua en todo el mundo, lo que subraya la urgencia de mejorar la eficiencia hídrica, aumentar la reutilización del agua y desarrollar resiliencia al cambio climático.
Por lo que empresas de estos segmentos han comenzado a tomar medidas para reducir el consumo de agua.
Han adoptado tecnologías más eficientes en sus procesos de producción, han cambiado envases de productos livianos que consuman menos agua; además, impulsan el uso responsable del líquido, a través de campañas de marketing y compromisos públicos, según un reporte de la firma europea Roland Berger.
Añade que a medida que el estrés hídrico empeora, es probable que una mayor intervención gubernamental y nuevas regulaciones aceleren las iniciativas de las empresas para un uso más racional del líquido.
Te recomendamos: Promueven el cuidado del agua en la agricultura