Los riesgos y las preocupaciones que surgieron durante el Covid-19 aumentaron significativamente dentro del sector de la industria alimentaria, en especifico el sector agrícola puso al descubierto la fragilidad de los sistemas y economías de América Latina.
El cambio climático, la regulación de nuevas innovaciones, la agricultura y su impacto ambiental, y políticas europeas como el Green Deal y Farm to Fork, son algunos de los temas y desafíos que enfrenta la agricultura latinoamericana, después de un año de impacto.
Alimentar a la creciente población de forma sostenible y el reto de la innovación para proteger los cultivos y el medio ambiente es la gran tendencia en la actualidad. Uno de los desafíos son las regulaciones a las innovaciones que son:
- Necesarias
- Correctas
- Basadas en la ciencia
Objetivos de sostenibilidad
El sector agrícola se ha planteado cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030 es necesario el uso de nuevas tecnologías, superar la brecha digital de los pequeños agricultores, modernizar las regulaciones, y tener consumidores informados sobre la ciencia y la tecnología en la agricultura.
En este sentido, la Unión Europea se ha planteado en este sentido, la agricultura recuperó un protagonismo estratégico en la agenda política no solo por los temas de seguridad alimentaria, también en la recuperación económica de los países.
Dentro de esta iniciativa se pretende reducir el uso y el riesgo de plaguicidas químicos, así como El uso de los plaguicidas más peligrosos en un 50% para el año 2030. Es también una oportunidad para posicionar todo lo que ya se hace por la sostenibilidad de la región y resaltar a nuestros gobiernos lo que falta por hacer y diferenciando las par2cularidades de la agricultura tropical.
La tecnología y su importancia en el sector agrícola
El mundo agrícola es, en general, de corte conservador. Las técnicas, las formas de proceder, cultivar y hasta comerciar suelen conservarse durante generaciones. Sin embargo, la evolución de la tecnología está alcanzando velocidades inusitadas. A día de hoy encontramos:
- robots
- drones
- biotecnología
- Internet de las Cosas
- 5G unidas a los cultivos.
Adaptarse a estas tecnologías, sin embargo, sigue siendo un reto para muchos agricultores que no disfrutarán de las aportaciones que estos avances les prometen. Esto se debe, en parte, a la curva de aprendizaje ligada a algunas de dichas tecnologías. En otras ocasiones, la cuestión es económica o de recursos. En ciertos casos, es meramente cultural.
Es importante cambiar el paradigma agronómico, entendiendo el campo como un medio vivo, que hay que tratar con vistas a la sostenibilidad. Eso no implica, en ningún caso, tener que rechazar la productividad. La biotecnología sale al rescate para poder adecuar ambos aspectos: la producción con la sostenibilidad.
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