Los probióticos de próxima generación son una novedosa bioterapia activa surgida en los últimos diez años. Se basan en bacterias comensales desconocidas, aisladas por métodos de biología molecular.
Representan un nuevo desafío para ser usadas en afecciones específicas relacionadas con severas alteraciones de disbiosis en la microbiota intestinal.
Un estudio de Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, señala que el surgimiento del término probiótico de próxima generación (PPG) es de significado similar al término producto bioterapéutico vivo (LBP, por sus siglas en inglés).
El cual es un producto biológico que contiene organismos vivos, aplicable a humanos y no es una vacuna.
Este concepto emergente incluye el microorganismo bioterapéutico vivo y los otros ingredientes que componen el LBP. Los requisitos para probióticos de próxima generación son más estrictos que en los probióticos tradicionales.
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Aportes de los PPG
El citado estudio indica que los probióticos de próxima generación se desarrollado desde el 2010, por los aportes alcanzados en las investigaciones del microbioma intestinal en ratones y en limitados ensayos clínicos en humanos por nuevas cepas de bacterias.
Las cuales son identificadas y seleccionadas como candidatas a PPG y han puesto en evidencia la asociación del daño producido en la microbiota intestinal por la disbiosis provocada por determinadas afecciones.
Los estudios se realizaron con modernas técnicas de biología molecular, fundamentados en la secuenciación de nueva generación, la cual consta de dos etapas principales:
- Identificación del gen bacteriano en la subunidad
- Análisis bioinformático.
El proceso de identificación se basó en el análisis comparativo de composición de la microbiota entre individuos sanos y no saludables, de distintos géneros.
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Estas bacterias se perfilan como probióticos de nueva generación
Akkermansia muciniphila. Es una bacteria que pertenece al filo Verrucomicrobia y representa 5 % del total de la microbiota intestinal. Su efecto se resume en dos direcciones: trastornos metabólicos relacionados con la obesidad y asociados a inmunoterapia del cáncer. Tiene un “perfil metabólico más saludable”, fundamentado en menor grado de inflamación y perioxidación de lípidos séricos, según determinaciones especializadas.
Faecalibacterium prausnitzii. Es una bacteria grampositiva muy sensible al oxígeno, es la única especie del género Faecalibacterium y representa entre 3 y 5 % del total de la MI en humanos adultos sanos. Sus efectos antiinflamatorios se evaluaron in vivo y en vitro. Sus propiedades antiinflamatorias son evidentes mediante la reducción de las citocinas antiinflamatorias. De igual manera, se evaluó la capacidad de reducir la disbiosis, por parte de la bacteria viva o su sobrenadante.
Bacteroides fragilis son bacterias comensales gramnegativas, aeróbicas, resistentes a la bilis y no forman esporas. Son los colonizadores iniciales del intestino, se adquieren en el momento del nacimiento a través del parto vía vaginal, y resultan beneficiosos para la salud del huésped. Entre las especies de Bacteroides el más común es B. fragilis, productor de polisacárido, molécula con respuestas inmunes dependientes de células T, relacionadas con la reacción inmunológica del huésped, mediante la intervención en la homeóstasis del sistema inmune.
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