La lata de aluminio es el envase que más contribuye a la economía circular, esto de acuerdo con el último estudio encargado por el International Aluminium Institute (IAI) sobre la circularidad de tres materiales para envases de bebidas tales como el aluminio, vidrio y plástico (PET).
Dicho estudio mostró que, en comparación con las latas de aluminio, una mayor proporción de botellas de vidrio y plástico acaban en vertederos al no recogerse. Además, las pérdidas en el sistema de reciclaje una vez recogidas son tres veces mayores para las botellas de plástico PET y de vidrio que para las latas de aluminio.
“A pesar de que ningún envase de bebidas ha alcanzado completamente su potencial de circularidad todavía, el aluminio supera al vidrio y al plástico (PET) en todas las etapas del sistema de gestión de residuos. Una vez estas son recogidas, las latas de aluminio tienen una tasa de eficiencia inigualable del 90% en los procesos de clasificación, reprocesamiento y refundición, en comparación con el vidrio (67%) y el PET (66%)”, explicó Ramón Arratia, vicepresidente global de Asuntos Públicos de Ball Corporation.
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La importancia de la lata de aluminio
La lata de aluminio fue producida en masa por primera vez por Coors Brewing Company en la década de 1950 para mejorar el sabor de la cerveza y proporcionar un recipiente más sostenible que las latas de acero. En este estudio podemos ver cómo los objetivos medioambientales de una investigación pionera de un nuevo producto, hace ya tantos años, siguen cumpliéndose en la actualidad.
“Con motivo de la celebración del 50 aniversario del Instituto este año, hemos reflexionado sobre la larga historia de nuestra organización en materia de recogida, análisis y elaboración de modelos de datos. El aluminio es uno de los materiales más reciclables del planeta y, dado el beneficio económico y ambiental del metal en la economía mundial, el IAI está trabajando para garantizar que los productos al final de su vida útil vuelvan al ciclo de reciclaje del aluminio”, indicó Marlen Bertram, directora de Escenarios y Pronósticos del IAI.
Por último, Emilio Braghi, vicepresidente ejecutivo de Novelis y presidente de Novelis Europe, añadió que los sistemas de recolección y clasificación son esenciales para aumentar la circularidad y desbloquear todo el potencial de los materiales infinitamente reciclables. Necesitamos un marco político que incentive sistemas circulares y de reciclaje reales, donde los envases de bebidas se reciclen una y otra vez sin perder calidad al final de su vida.
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