Los contenedores intermedios flexibles para graneles (FIBC, por sus siglas en inglés) son bolsas grandes típicamente hechas de PP tejido. Están diseñadas para transportar y almacenar materiales a granel como polvos, gránulos y escamas.
Los FIBC representan una alternativa más sostenible desde el punto de vista medioambiental y financiero, en comparación con los contenedores rígidos tradicionales, ya que pueden reutilizarse y reciclarse al final de su vida útil.
En todo el mundo, miles de millones de FIBC circulan cada día, la mayoría de ellos se utilizan una sola vez y luego se desechan.
Los especialistas indican que, si se recolectaran, reciclaran y convirtieran nuevamente en nuevos FIBC, se podrían ahorrar enormes cantidades de recursos y reducir significativamente la contaminación ambiental.
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FIBC circulares
Para los especialistas es importante que el uso de material reciclado en la producción de nuevos FIBC no comprometa la calidad ni las propiedades mecánicas. El objetivo de obtener la aprobación alimentaria para los FIBC con contenido reciclado también debería ser una máxima prioridad.
Como productor de material reciclado y usuario de FIBC, no conocíamos ni estábamos familiarizados con las directrices para diseñar un FIBC sostenible antes del proyecto.
Sin embargo, al igual que con nuestras soluciones de embalaje, la posibilidad de reciclaje debe tenerse en cuenta desde el diseño inicial del producto para poder desarrollar productos sostenibles de forma específica.
Es importante disponer de suficientes materias primas, por ejemplo, FIBC usados, para poder llevar a cabo un proceso de reciclaje de forma sensata y económica a largo plazo. Resulta necesario trabajar en infraestructuras de recogida y circuitos cerrados entre fabricantes, distribuidores y usuarios
finales.
Reciclaje de FIBC
El mayor desafío al que se enfrentan las empresas en el proceso de reciclaje sigue siendo obtener cantidades suficientes de regranulado de alta calidad, ya sea PET o PP.
De esa forma, solo se podrá incluir una gran proporción de material reciclado en la producción del tejido FIBC sin comprometer la calidad. La recolección y devolución de los FIBC usados a un flujo de reciclaje de circuito cerrado sigue siendo un problema que se puede mejorar.
El tejido FIBC debe cumplir criterios muy estrictos en cuanto a resistencia al desgarro para garantizar un transporte y almacenamiento seguros, sin poner en peligro vidas humanas. La tecnología de reciclaje y extrusión de cintas garantiza que se cumplan estos estándares de alta calidad cuando se utilizan materiales reciclados”.
El estado de los FIBC recolectados para su reciclaje, por ejemplo, la limpieza y la composición del material, desempeñan un papel importante a la hora de salvaguardar la calidad del material reciclado obtenido.
Por último, los recicladores de plásticos europeos están pasando apuros porque las crecientes exportaciones de residuos plásticos de la UE redujeron drásticamente el material de entrada. Y provocaron el cierre de instalaciones de reciclaje de plásticos en toda Europa.