La sequía ha generado una subida de los precios de los cereales cultivados en países como Brasil, Argentina y Paraguay.
La sequía ha generado una subida generalizada de los precios de los cereales cultivados en América Latina. Según el informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), los precios del maíz, el trigo y la soja, se elevaron más de 30 % entre los meses de junio y julio de 2012. Esto podrá ser un beneficio en el corto plazo para las naciones que venden grandes cantidades en el mercado internacional.
"Los países exportadores netos de estos granos y de la soya, como Argentina, Brasil y Paraguay podrán aumentar sus exportaciones a corto plazo. Además, podrán aumentar los ingresos que destinan a la inversión en la agricultura y la expansión de sus sistemas de protección social, aseguró Raúl Benítez, representante de la FAO para América Latina y el Caribe. Benítez también avisó que este aumento en los precios representa un desafío adicional para los países centroamericanos, cuyas importaciones de maíz y soya dependen de la producción estadounidense.
La organización advirtió que parte del aumento repentino de los precios de los alimentos viene de los altos costos que ha alcanzado el maíz y otros granos a causa del tiempo seco que está afectando a Estados Unidos.
"La consecuencia de la sequía es que los precios aumentan en el mercado, pues Estados Unidos es uno de los productores más grandes del mundo de este producto. Esto afecta todo lo que tenga que ver con el maíz, indicó Diego Otero, rector de la universidad Uniciencia de Bucaramanga.
Las consecuencias que pueda traer una crisis alimentaria ya despertaron la atención de los países del G20, quienes anunciaron que sostendrán una teleconferencia a fines de agosto para analizar si se requiere una reunión internacional de emergencia para hacer frente a los crecientes precios de los granos, a través de una convocatoria del llamado Foro de Respuesta Rápida.