A partir de febrero de 2020, nuevas normas para fórmulas infantiles y de continuación entrarán en vigor en la Unión Europea (Reglamento Delegado de la Comisión 2016/127).Estas normas estipulan la adición obligatoria del ácido docosahexaenoico (DHA) de ácidos grasos omega-3 en concentraciones 2-3 veces más altas que las que se encuentran típicamente en la leche humana y en la fórmula infantil que contiene DHA utilizada durante las últimas 2 décadas.
Sin embargo, no hay obligación de agregar el ácido araquidónico del ácido graso omega-6, que también se proporciona siempre con leche materna humana.
No se han planteado grandes preocupaciones sobre esta nueva composición de fórmula para lactantes estipulada por la legislación de la UE, porque la idoneidad y la seguridad no se han establecido en estudios clínicos.
En ese sentido, la organización sin fines de lucro Child Health Foundation, en cooperación con la Academia Europea de Pediatría (www.eapaediatrics.eu), realizó un taller científico con pediatras e investigadores internacionales competentes en esta área también. como representantes de organizaciones de padres para explorar los problemas que surgen aquí.
Los expertos enfatizan que la leche materna humana es la primera opción para alimentar a los bebés, y también es la referencia que guía la composición de los biberones.
A diferencia de la composición de fórmula propuesta por la nueva legislación de la UE, la leche materna siempre proporciona DHA y ácido araquidónico, con niveles medios de ácido araquidónico que son más altos (0.5% de grasa) que los de DHA (0.3%).
En el lactante, estas grasas complejas se depositan en cantidades relativamente grandes en el cerebro en crecimiento y en las células inmunes. Los estudios clínicos controlados compararon los efectos de las fórmulas infantiles con diferentes contenidos de estas grasas.
La fórmula con DHA alto pero concentraciones bajas de ácido araquidónico indujo resultados atenuados de las pruebas de desarrollo infantil hasta la edad de 9 años, y también redujo el contenido de ácido araquidónico cerebral en primates infantiles.
Por lo tanto, los expertos critican la nueva regulación europea para la fórmula infantil. Recomiendan encarecidamente proporcionar a los bebés, que estén o no amamantados por completo, una fórmula infantil que suministre tanto DHA como ácido araquidónico, con al menos la misma cantidad de ácido araquidónico que el DHA.
La Notificación del Proyecto de Reglamento Delegado de la Comisión y el Informe sobre la situación de los alimentos dietéticos /alimentos para grupos específicos con la aplicación del reglamento (ue) nº 609/2013 rev.2 pueden consultarse en los documentos relacionados.
Fuente: Child Health Foundation