México.- De acuerdo con Informes de Expertos, el mercado global del tequila alcanzó los 11.87 mil millones dólares en 2024, y se proyecta un crecimiento anual compuesto del 6 % hasta 2034, con destino a 20 mil millones de dólares.
En volumen, se estima pasar de 457.96 millones de litros en 2024 a casi 598 millones en 2029, con crecimiento más rápido en Asia‑Pacífico y mayor participación en América del Norte, según datos de Mordor Intelligence.
Para los productores artesanales en los Altos de Jalisco, esto significa oportunidad de integrarse en cadenas globales de valor premium, así como hacer sinergia con agroturismo, cultura y certificaciones de sostenibilidad.
El tequila artesanal es una variante del tequila 100% agave que se produce mediante técnicas tradicionales, en lotes limitados y con mínima intervención industrial. Está regulado por la Norma Oficial Mexicana NOM-006-SCFI-2012, que establece criterios para su elaboración y comercialización.
Para que un producto sea considerado tequila artesanal, debe cumplir con ciertos procesos establecidos por el Consejo Regulador del Tequila (CRT), dentro de la Denominación de Origen Tequila (DOT).

Un tequila que le rinde tributo a la tierra
Originario de Jesús María, en los Altos de Jalisco, Teremana es un tequila que honra la tierra y la dedicación detrás de su proceso de elaboración. Su nombre proviene de la combinación de “Terra” (tierra en latín) y “Mana” (un concepto polinesio que representa el espíritu), reflejando la esencia misma de esta bebida.
El terroir único de suelos volcánicos, la altitud y el clima templado hacen que el agave azul Weber, cultivado en la región, desarrolle sabores más dulces, afrutados y florales.
Cada planta es cosechada a mano por jimadores expertos, garantizando un tequila más redondo y con carácter.
Este tequila se elabora en la Destilería Teremana de Agave donde el proceso artesanal toma protagonismo: el agave se cocina en hornos tradicionales de ladrillo durante 72 horas, suavizando sus fibras y preservando notas cítricas.
La doble destilación se realiza en pequeños alambiques de cobre que eliminan impurezas y resaltan la suavidad y complejidad del tequila. Además, cada botella es etiquetada a mano.
Está disponible en dos variedades:
- Teremana blanco: fresco y vibrante, con notas cítricas y un final suave.
- Teremana reposado: añejado más de 2 meses en barricas de roble, que aporta notas de vainilla y roble, con un carácter más redondo y delicado.