El mercado global de bebidas alcohólicas está experimentando un cambio paradigmático: el consumo consciente y el bienestar están impulsando un crecimiento acelerado de la cerveza sin alcohol, mientras que perfiles tradicionales como las cervezas tipo ale mantienen su relevancia por atributos sensoriales y artesanales.
Un informe de IWSR proyecta que la cerveza sin alcohol crecerá un 8% anual hasta 2029, mientras que se espera que el volumen de cerveza ale disminuya un 2% anual en ese mismo período.
A pesar del reciente crecimiento, la cerveza sin alcohol dista mucho de convertirse en la categoría de cerveza más vendida a nivel mundial y solo representa alrededor del 2% del mercado cervecero mundial.
Con una cuota de mercado del 92%, la cerveza lager es, con diferencia, la categoría de cerveza más grande y sigue creciendo, aunque a un ritmo más lento que la cerveza sin alcohol.
Impulsores del crecimiento de la cerveza sin alcohol
Salud y bienestar
Impulsada por un enfoque en salud pública, el aumento del consumo moderado y la conciencia por los estilos de vida saludables entre jóvenes y adultos
Un reciente informe documenta que el 40 % de millennials y muchos de la Gen Z están optando por bebidas 0.0 %
En el Reino Unido e Irlanda, el resurgimiento del "Movimiento templanza" se traduce en una priorización del bienestar, lo cual impulsa bares y locales que sirven exclusivamente sin alcohol.
Presión jurídica y social
Etiquetado de advertencia en Irlanda, regulaciones corporativas reforzadas y presión regulatoria en mercados como Reino Unido impulsan la adopción de productos sin alcohol por parte de empresas europeas.
La presión de salud pública y campañas educativas continúan impulsando la disminución del consumo de etanol entre Gen Z.
Factores culturales y demográficos
La Gen Z representa un bloque que prioriza valores wellness, actividad física, salud mental y redes sociales sobre el ocio hedonista.
Además, segmentos como mujeres embarazadas y consumidores con motivos religiosos o sociales están adoptando opciones sin alcohol.

Comportamiento del consumidor
Aunque solo un 13 % de consumidores adquieren estas bebidas, su frecuencia de consumo es similar a la de los consumidores de alcohol.
No se trata solo de abstinencia total: surgen consumidores que eligen bebidas sin alcohol en ciertos momentos (entenada como “sobrio‑curiosos”), alterando solo la frecuencia.
Aparición de bares sin alcohol y cafés nócturnos, además de barras de producción solo sin alcohol, reflejan un entorno social creciente que demanda sobriedad.
Para alentadores de género, familias, eventos deportivos y millennials sobrios, la cerveza sin alcohol aporta inclusión social sin los efectos del etanol.
¿Por qué una tendencia global tan fuerte?
Las cerveceras están invirtiendo en tecnologías para eliminar alcohol post-fermentación, manteniendo aroma, textura y espuma, aunque con costos elevados.
Se lanzan versiones premium de sin alcohol, con ingredientes funcionales, bajo en calorías y perfiles sensoriales complejos.
Las cervezas sin alcohol requieren menor licencia de venta, abriendo oportunidades de distribución en gimnasios, aeropuertos y cadenas de retail sin restricciones severas.
Marcas consolidadas como Guinness dedicaron inversiones significativas para ampliar producción sin alcohol.
Perspectiva estratégica: sin alcohol vs ale
Sin alcohol: Crecimiento acelerado es el predominio entre consumidores conscientes, canalización transversal (bares libres, retail, ecommerce).La ventaja se da en inclusión, salud, reducción de riesgo etílico y posicionamiento wellness.
Ale: Crecimiento sostenido con tracción por la premiumización, turismo cervecero y personalización sensorial.Nichos de mercado fuertes — craft, sour, IPA — y fidelización por comunidad y sabor complejo.
Convergencia esperada
Surgen productos híbridos como cerveza sin alcohol con nota de lúpulo definida y cervezas de “bajo alcohol” (~0,5 %) para mantener matices de ale.
Estrategia multi‑portafolio: las cervecerías matrices lanzan versiones sin alcohol de sus icónicas ales.
Las inversiones en batch control y eliminación de etanol permiten replicar perfiles de ale sin sacrificar sabor.

Oportunidades y desafíos
Entre las oportunidades destacan la diversificación de canales (retail general, institucional, wellness), entrada a segmentos específicos (sport, abstemios, familias).
Uno de los principales desafíos es el equilibrio de precio por costos unitarios altos en procesos de des-alcoholización, necesidad de innovación sensorial, y cambio cultural frente a tradición artesanal.
La cerveza sin alcohol está redefiniendo la estrategia de la industria cervecera: su crecimiento, acelerado y motivado por consumidores más saludables, regresa la cerveza a entornos de bienestar y socialidad soberana.
Frente a esto, las cervezas tipo ale mantienen fortalezas en comunidad y experiencia sensorial, pero se enfrentan a un entorno donde la diversidad de estilos y perfiles debe ser complementada con salud, soberanía y conveniencia. La convergencia entre tradición artesanal y modernidad saludable marcará las estrategias de portafolio e innovación para los próximos años.
Te recomendamos: Encuentran nueva técnica para desarrollar vino y cerveza sin alcohol