Nuevo estudio demuestra que el sobrepeso está más relacionado con un alimento insospechado: la papa
Durante años, el consumo de refrescos ha sido considerado como una de las principales causas de obesidad. Sin embargo, un nuevo estudio demuestra que el sobrepeso está más relacionado con un alimento insospechado: la papa.
Con el fin de determinar el verdadero impacto de los hábitos alimenticios sobre el peso corporal, científicos de la Universidad de Harvard analizaron la dieta de 120,000 sujetos en todo Estados Unidos a lo largo de los últimos 12 años. Al final, y para sorpresa de todos, el equipo descubrió que la papa desde siempre considerada como un alimento saludable y de ningún modo dañina para el organismo- juega un papel definitivo en la ganancia de peso e incluso la obesidad, sobre todo preparadas a la francesa.
En efecto, aquellos individuos que a diario consumían una porción de papas a la francesa aumentaron hasta 2 kilogramos de peso al cabo de cuatro años.
Asimismo, quienes comían diariamente una porción de papas fritas, subieron en promedio 800 gramos en ese mismo lapso de tiempo, mientras que los que acostumbraban comer papa en otras presentaciones hervida, asada, en puré- ganaron 600 gramos en esos mismos cuatro años. En contraposición, los investigadores encontraron que el consumo diario de refrescos significaba, en promedio, una ganancia de menos de 500 gramos de peso cada cuatro años.
Publicado en el New England Journal of Medicine en junio pasado, el estudio sorprendió a muchos al poner en evidencia los verdaderos efectos de la papa y los refrescos sobre el peso y la salud. Si desde siempre se ha creído que este tipo de bebidas constituye uno de los principales culpables en el desarrollo de la obesidad, las más recientes investigaciones aportan datos que refutan esta idea.
Bajo el título de Nutritively Sweetened Beverage consumption and Body Weight, otro grupo de científicos realizó un meta análisis de un total de 12 investigaciones acerca de la relación entre los refrescos y la obesidad. El resultado fue igualmente sorprendente: los expertos no encontraron variación alguna en el índice de masa corporal a partir del consumo de estas bebidas.
En todo caso, ambos estudios sugieren que el estilo de vida saludable, la dieta balanceada y una rutina fija de actividad física son la clave para garantizar una buena salud y el peso correcto.
Fuentes:
1. Changes in Diet and Lifestyle and Long-Term Weight Gain in Women and Men. Dariush Mozzaffarian, et. al. New England Journal of Medicine, 23 junio 2011.
http://www.foodpolitics.com/wp-content/uploads/NEJMoa1014296.pdf
2. Nutritively Sweetened Beverage Consumption and Body Weight. Mattes Shikany, et. al. Obesity Reviews no. 13, 2011.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/20524996