Señaló que las bebidas energéticas pueden tener un impacto dañino para la salud cuando se consumen de manera excesiva y sobre todo si se combinan con alcohol
En la más reciente edición de su publicación Viva Salud, la investigadora Nancy López, de la Dirección de Nutrición de Comunidades del INSP, revela que en promedio, las bebidas energéticas contienen casi 300 miligramos de cafeína por recipiente, lo que duplica la cantidad del estimulante de una taza de café.
Asegura que un adulto promedio no debe consumir más de 400 miligramos de cafeína, por lo que no es recomendable que tomen más de una botella de esas bebidas.
El consumo superior a esa cantidad se ha asociado a distintos efectos como nerviosismo, irritabilidad, insomnio, temblores, incremento de la cantidad de orina, arritmia, disminución de densidad ósea y trastornos gástricos.
La Cofepris ha señalado que hay personas que llegan a tomar hasta 10 latas en una fiesta, advierte la investigadora. Agrega que en el caso de mujeres en edad reproductiva y en los niños, los límites recomendados de cafeína son de 300 miligramos diariamente, por lo tanto, es necesario que eviten el consumo de bebidas energéticas con altos niveles de cafeína.
En los adolescentes, lo recomendable es que consuman un máximo de 100 miligramos de cafeína al día, ya que el consumo en exceso se ha asociado con elevación de la presión arterial, destaca.
Señala que el efecto de estas bebidas puede incrementarse cuando llevan otros estimulantes como el guaraná y el ginseng, que ya contienen cafeína.
En el artículo, la experta afirma que el principal riesgo se presenta cuando se combina con el alcohol, pues estas bebidas impiden que la persona se dé cuenta de la cantidad de alcohol que ingirió porque producen un estado de alerta.
Con ello, subraya, la persona consume más alcohol y durante periodos más largos. La combinación de bebidas alcohólicas con bebidas energéticas se ve reflejada en una pobre coordinación motora del cuerpo (alteraciones en el equilibrio y en el andar), así como en una tardanza en el tiempo de reacción, por ejemplo, para evitar un choque, síntomas que si bien se observan también cuando se consume sólo alcohol, son mayores cuando dicho consumo se da en combinación con bebidas energéticas, asegura.
Fuente: Agencia Reforma