Durante el segundo taller gratuito, Amada Gálvez, de ILSI, se explayó sobre alimentos funcionales y nutracéuticos y sostuvo que hay que buscar la biodiversidad como consumidores. En la tercera ponencia de dicho ciclo, Edith Barrios, Gerente Corporativo de Investigación de Alimentos en Gruma, destacó la presencia de los flatbreads a nivel mundial.
Durante el segundo taller gratuito, Amada Gálvez, de ILSI, se explayó sobre alimentos funcionales y nutracéuticos y sostuvo que hay que buscar la biodiversidad como consumidores. En la tercera ponencia de dicho ciclo, Edith Barrios, Gerente Corporativo de Investigación de Alimentos en Gruma, destacó la presencia de los flatbreads a nivel mundial.
El segundo de los talleres gratuitos estuvo a cargo de Amanda Galvez, Consejera de ILSI México. Su disertación estuvo enfocada a Alimentos Saludables: funcionales y nutracéuticos. Comenzó explicando que los nutracéuticos son una combinación de nutrimentos con farmacéuticos. No son ni alimentos ni medicamentos. Es por esto que muchos alimentos caen en un vacío legal gracias a que no se cuenta con un conocimiento de cómo funcionan estas cosas.
Las mujeres mexicanas tienen una expectativa de vida de 75 años, teniendo en cuenta que se trata de una población tremendamente enferma, con diabetes y obesidad, lo que acarrea enfermedades. Esta expectativa de 75 años probablemente disminuya. Es importante tener mucho cuidado con los productos ´milagro´, detalló Galvez.
Explicó que los alimentos nutracéuticos contienen sustancias bioactivas, que pueden ser positivas o negativas. Asimismo, detalló que los alimentos contienen nutracéuticos y tóxicos. La cantidad de bioactivos depende de la fuente. Si la fuente tiene menos tóxicos que nutracéuticos, se enfrenta el potencial protector contra las enfermedades crónicas.
Uno de los avances de la ciencia muestra, por ejemplo, que el consumo de cebolla y frijol en las mujeres contribuye a disminuir la probabilidad de contraer cáncer. Esto implica que existen muchas evidencias de que el consumo de frutas y verduras es beneficioso para la salud.
Nuevas tendencias:
Obtener sustancias benéficas de los alimentos.
Aislarlas, concentrarlas y venderlas por separado.
Sin embargo, hay pocas reivindicaciones que se han probado.
Los nutracéuticos se venden como suplementos.
En Europa: PASSCLAIM.
¿Verduras y frutas o píldoras?
No todos los compuestos benéficos pueden comprarse en píldoras.
No todos los productos son puros.
No todos los extractos están estandarizados.
Los suplementos evitan que se consuman otros fitocompuestos benéficos.
Se evitan efectos sinérgicos de otros compuestos y/o de sus matrices alimentarias.
Más tarde, Amanda Gálvez se centró en las propiedades de ingredientes funcionales, tales como carotenoides, fibras solubles e insolubles, ácidos grasos, flavonoides, prebióticos y probióticos, betaglucanos, luteína, licopeno, entre otros. Destacó que es fundamental que las propiedades se encuentren científicamente comprobadas y que la influencia sobre la salud también depende del estilo de vida de la persona. Sin embargo, resaltó que muchas veces los estudios no son contundentes porque hay mucha versatilidad de las plantas, porque se hacen con poco tiempo o porque se realizan en animales.
La especialista también sostuvo que hay que buscar la biodiversidad como consumidores. En especial los mexicanos, que cuentan con una amplia variedad de frutas y verduras en su geografía. Asimismo, es crucial conocer a fondo la química de las moléculas y verificar la pureza de los extractos para los estudios que se realizan y las aplicaciones propuestas.
Mercadotecnia y Desarrollo: el caso de los flatbreads
Edith Barrios, miembro de la compañía Gruma, estuvo a cargo de este taller. Destacó las principales tendencias que distinguen a la innovación en el segmento de panadería: tendencia saludable, vuelta a las raíces y flatbreads (acompañantes).
El primero de los puntos corresponde a la creciente innovación en materia de alimentos saludables, con granos enteros, ingredientes funcionales y para grupos específicos. En relación a las raíces, destacó que los panes artesanales y caseros vuelven a establecer vínculos con los consumidores y que los panes retro, que recuerdan a viejas épocas, también están experimentando una revalorización. A continuación, definió a los flatbreads como una combinación entre los alimentos nicho, según las distintas culturas, y las galletas.
Estos productos cubren las necesidades de los consumidores de hoy: indulgencia, salud y conveniencia. Aun cuando el flatbread es étnico primordialmente, hoy no es un producto de nicho. El consumidor local en cualquier país los adopta de otras culturas, expresó Barrios.
Tras esta introducción, la ejecutiva mencionó como ejemplo a su compañía, que acaba de lanzar Mission Flatbreads of the World, una marca que ofrece experiencia y marketing sensorial, brindando productos de raíces italianas, indias y marroquíes, entre otras especialidades. Los consumidores están en busca de nuevas experiencias sensoriales, que constituyan una distracción y que provengan de otras cocinas del mundo, explicó.